Logo de YouVersion
Icono de búsqueda

HECHOS 7:36-53

HECHOS 7:36-53 RV2020

Moisés los sacó de Egipto, tras haber realizado prodigios y señales en esa tierra, en el mar Rojo y en el desierto durante cuarenta años. Este es el Moisés que dijo a los hijos de Israel: El Señor vuestro Dios levantará entre vosotros un profeta como yo. A él oiréis. Este es el mismo Moisés que en la congregación del desierto medió entre el ángel que le habló en el monte Sinaí y nuestros padres y recibió palabras de vida para transmitírnoslas. Pero nuestros padres no quisieron obedecerle. Le rechazaron porque en sus corazones albergaban el deseo de volver a Egipto. Por eso le dijeron a Aarón: Haznos dioses que guíen nuestro camino, pues no sabemos qué ha sido de ese Moisés, el que nos sacó de Egipto. En aquellos días hicieron un becerro, le ofrecieron sacrificios y se regocijaban honrando a la obra salida de sus manos. Dios se apartó de ellos permitiendo que rindieran culto al ejército de astros celestes. Así está escrito en el libro de los profetas: Casa de Israel, ¿acaso me ofrecisteis víctimas y sacrificios en el desierto durante cuarenta años? Al contrario, llevasteis el tabernáculo de Moloc y la estrella de vuestro dios Refán, imágenes que os hicisteis para adorarlas. Os deportaré, pues, más allá de Babilonia. Nuestros padres tuvieron el tabernáculo del testimonio en el desierto, según había ordenado Dios cuando dijo a Moisés que lo hiciera conforme al modelo que había visto. Ese tabernáculo fue recibido a su vez por nuestros padres y lo introdujeron con Josué cuando tomaron posesión de la tierra de los gentiles, a los que Dios arrojó fuera ante la presencia de nuestros padres. Así hasta los días de David. David, fue del agrado del Señor, y quiso edificarle un tabernáculo al Dios de Jacob. No obstante, fue Salomón quien le edificó casa. Mas el Altísimo no habita en templos construidos por manos humanas. Dice el profeta: El cielo es mi trono y la tierra el estrado de mis pies. ¿Qué casa me edificaréis? —dice el Señor—; ¿O cuál es el lugar de mi reposo? ¿No hizo mi mano todas estas cosas? ¡Testarudos e incircuncisos de corazón y de oídos! ¡Siempre os oponéis al Espíritu Santo! ¡Sois iguales que vuestros padres! ¿A qué profeta no persiguieron vuestros padres? Mataron a los que antes habían anunciado la venida del Justo, a quien vosotros ahora habéis entregado y matado. Vosotros que recibisteis la ley por medio de ángeles y no la cumplisteis.

Lee HECHOS 7