1 REYES 15:1-24
1 REYES 15:1-24 RV2020
En el año dieciocho del rey Jeroboam hijo de Nabat, Abiam comenzó a reinar sobre Judá. Reinó tres años en Jerusalén. El nombre de su madre era Maaca, hija de Abisalom. Anduvo en todos los pecados que su padre había cometido antes de él. Su corazón no fue perfecto para con el Señor, su Dios, como el corazón de su padre David. Pero por amor a David, el Señor, su Dios, le dio una lámpara en Jerusalén, al poner en el trono a su hijo después de él y sostener a Jerusalén, por cuanto David había hecho lo recto ante los ojos del Señor, y de ninguna cosa que le había mandado se había apartado en todos los días de su vida, salvo en lo tocante a Urías, el heteo. Hubo guerra entre Roboam y Jeroboam todos los días de su vida. Los demás hechos de Abiam, y todo lo que hizo, ¿no está escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá? Y hubo guerra entre Abiam y Jeroboam. Cuando murió Abiam, fue enterrado en la ciudad de David y su hijo Asa le sucedió como rey. En el año veinte de Jeroboam, rey de Israel, Asa comenzó a reinar sobre Judá. Reinó cuarenta y un años en Jerusalén. El nombre de su madre era Maaca, hija de Abisalom. Asa hizo lo recto ante los ojos del Señor, como David, su padre, porque expulsó del país a los sodomitas y quitó todos los ídolos que sus antepasados habían hecho. También privó a su madre Maaca de ser reina madre, porque había hecho un ídolo de Asera. Asa deshizo, además, el ídolo de su madre y lo quemó junto al torrente de Cedrón. Sin embargo, los lugares altos no desaparecieron. Con todo, el corazón de Asa fue perfecto para con el Señor toda su vida. También puso en la casa del Señor lo que su padre había dedicado, y lo que él dedicó: oro, plata y alhajas. Hubo guerra continua entre Asa y Baasa, rey de Israel. Baasa, rey de Israel, subió contra Judá y fortificó Ramá, para evitar que se comunicaran con Asa, rey de Judá. Asa tomó toda la plata y el oro que había quedado en los tesoros de la casa del Señor y en los tesoros de la casa real, se los entregó a sus siervos y los envió a Ben-adad hijo de Tabrimón hijo de Hezión, rey de Siria, el cual residía en Damasco, con este mensaje: —Haya alianza entre nosotros, como entre mi padre y el tuyo. Aquí te envío un presente de plata y de oro. Ve y rompe tu pacto con Baasa, rey de Israel, para que se aparte de mí. Ben-adad aceptó la propuesta del rey Asa y envió a los jefes de sus ejércitos contra las ciudades de Israel. Conquistó Ijón, Dan, Abel-bet-maaca, toda Cineret y toda la tierra de Neftalí. Al saberlo Baasa, dejó de edificar Ramá y se quedó en Tirsa. Entonces el rey Asa convocó a todo Judá, sin exceptuar a nadie. Se llevaron de Ramá la piedra y la madera con que Baasa edificaba, y el rey Asa construyó con ello Geba de Benjamín y Mizpa. Los demás hechos de Asa, todo su poderío, todo lo que hizo y las ciudades que edificó, ¿no está todo escrito en el libro de las crónicas de los reyes de Judá? En los días de su vejez, Asa enfermó de los pies. Cuando Asa murió, fue enterrado con sus antepasados en la ciudad de David, y su hijo Josafat le sucedió como rey.