1 SAMUEL 9
9
Saúl es ungido rey#9,1—10,16: Un primitivo relato popular, lleno de colorido y sabor arcaico, sobre una anécdota de la vida rural (la búsqueda de unas asnas extraviadas), sirve para enmarcar el objetivo prioritario de la sección: la presentación del joven Saúl, su encuentro con Samuel y su elección y unción como primer rey de Israel.
1En la tribu de Benjamín había un hombre de buena posición llamado Quis, hijo de Abiel y descendiente de Seror, Becorat y Afiaj, el benjaminita.#10,23; 1 Cr 8,33. 2Quis tenía un hijo, llamado Saúl, un joven atractivo y el más esbelto entre los israelitas, pues les sacaba la cabeza a todos los demás. 3A su padre, Quis, se le habían extraviado las asnas; así que le dijo a su hijo Saúl:
— Llévate a uno de los criados y vete a buscar las asnas.
4Recorrió la serranía de Efraín y el término de Salisá, pero no encontró las asnas. Recorrió el término de Saalín, y nada. Recorrió también el término de Benjamín y tampoco las encontró. 5Cuando llegaron al término de Suf, Saúl dijo al criado que lo acompañaba:
— Vamos a regresar, no sea que mi padre empiece a preocuparse más por nosotros que por las asnas.
6Pero el criado le respondió:
— Mira, en esta ciudad vive un hombre de Dios#9,6: un hombre de Dios: Ver nota a 2,27. muy respetado, pues todo lo que dice se cumple puntualmente. Acudamos a él y quizá nos indique el camino que debemos seguir.
7Saúl le contestó:
— Pero, si vamos, ¿qué podemos llevar a ese hombre? Porque ya no nos queda pan en las alforjas y no tenemos nada que ofrecerle. ¿Qué nos queda?
8Y el criado le dijo:
— Mira, tengo a mano una pequeña moneda#9,8: una pequeña moneda: Lit. un cuarto de siclo. Ver TABLA DE PESAS, MEDIDAS Y MONEDAS. de plata. Se la daré al hombre de Dios para que nos indique el camino.
9(En Israel antiguamente, cuando alguien iba a consultar a Dios, decía: “Vamos a ver al vidente”; pues al que actualmente llamamos “profeta” antes se le llamaba “vidente#9,9: … vidente: La posición lógica de este versículo sería después de 9,11 donde aparece la expresión “vidente”, objeto de la presente explicación.”).
10Y Saúl respondió:
— De acuerdo, vamos.
Y se dirigieron a la aldea donde vivía el hombre de Dios. 11Cuando subían la cuesta de la aldea, encontraron a unas muchachas que iban en busca de agua y les preguntaron:
— ¿Está aquí el vidente?#Eclo 46,15.
12Ellas les contestaron:
— Sí, ahí un poco más adelante. Pero daos prisa, pues ha llegado hoy a la aldea, porque el pueblo celebra un sacrificio en el santuario#9,12: santuario: Lit. lugar alto: En hebreo bamá. Con este término se designan ciertos santuarios locales que eran paganos en su origen, pero en los que los israelitas terminaron dando culto al Señor, y, por tanto, no siempre estuvieron mal considerados. Sin embargo, debido a sus raíces paganas, fueron a menudo combatidos por los profetas. El rey Josías los suprimió definitivamente (2 Re 23) concentrando todo el culto legítimo en el Templo de Jerusalén.. 13Al llegar a la aldea lo encontraréis, antes de que suba a comer al santuario. La gente no comerá hasta que él llegue, pues debe bendecir la ofrenda#9,13: bendecir la ofrenda: Expresión inusual, que delata la antigüedad del relato. Además de actuar como profeta, Samuel ejerce funciones sacerdotales.. Después podrán comer los invitados. Así que subid ahora, porque lo encontraréis inmediatamente.
14Ellos subieron hacia la aldea y cuando entraban en ella, se toparon con Samuel que salía para subir al santuario local. 15El día anterior de la llegada de Saúl, el Señor había revelado directamente a Samuel lo siguiente:#Ex 3,7.9; Jue 3,9.15; Hch 9,10-16.
16— Mañana a estas horas te enviaré a un hombre de la región de Benjamín y tú lo ungirás como jefe de mi pueblo Israel. Él defenderá a mi pueblo del poder de los filisteos, pues he visto el sufrimiento de mi pueblo#9,16: lo ungirás como jefe: En esta tradición de la elección de Saúl aún no aparece el título de melek (rey), sino el de naguib (jefe, príncipe), que podía designar a un líder carismático o a un jefe militar. En los círculos del norte el término “naguib” era preferido al de “melek”.— el sufrimiento de mi pueblo: Clara referencia al relato de la vocación de Moisés (Ex 3,7.9): el nuevo elegido es presentado con las credenciales de los grandes líderes de Israel. y me han llegado sus lamentos.
17Cuando Samuel vio a Saúl, el Señor le comunicó:
— Ahí tienes al hombre del que te hablé. Ese gobernará a mi pueblo.
18Saúl se acercó a Samuel a la entrada de la ciudad y le dijo:
— Por favor, indícame dónde está la casa del vidente.
19Samuel le respondió:
— Yo soy el vidente. Sube delante de mí al santuario, que hoy comeréis conmigo y mañana por la mañana te dejaré marchar y te revelaré todo cuanto te preocupa. 20En cuanto a las asnas que se te perdieron hace tres días, deja de pensar en ellas, porque ya han aparecido. Ahora el principal interés de Israel sois tú y la familia de tu padre.
21Y Saúl contestó:
— ¿Por qué me dices eso si yo no soy más que un benjaminita, de la tribu más pequeña de Israel, y mi familia es de las más insignificantes#9,21: de las más insignificantes: Reproducción casi literal de Jue 6,15; la elección de Saúl acumula rasgos de los salvadores del pueblo. entre las familias de la tribu de Benjamín?#Jue 6,15; ver Jr 1,6.
22Samuel tomó a Saúl y a su criado, los introdujo en la sala y les asignó el lugar de la presidencia entre los invitados, que eran unos treinta. 23Luego dijo al cocinero:
— Tráete la ración que te di y que te encargué que guardaras.
24El cocinero sacó una pierna entera y se la sirvió a Saúl. Samuel le dijo:
— Ahí tienes lo que estaba reservado: sírvete y come, pues se te había guardado para este momento cuando invité a la gente.
Y Saúl comió aquel día con Samuel. 25Luego bajaron del santuario a la aldea, prepararon a Saúl un lecho en la terraza#9,25: … un lecho en la terraza: Así la versión griega avalada por los manuscritos hebreos de Qumrán. El hebreo del texto masorético dice: y habló con Saúl en la terraza. 26y se acostó. Al amanecer, Samuel llamó a Saúl, diciéndole:
— Levántate, que voy a despedirte.
Saúl se levantó y los dos salieron a la calle. 27Cuando bajaban por las afueras de la aldea, Samuel dijo a Saúl:
— Di a tu criado que nos adelante. Y tú espera un momento, que tengo que comunicarte la palabra de Dios.
Actualmente seleccionado:
1 SAMUEL 9: BTI
Destacar
Compartir
Copiar
¿Quieres tener guardados todos tus destacados en todos tus dispositivos? Regístrate o inicia sesión
La Biblia, Traducción Interconfesional (BTI) versión española Copyright © Sociedad Bíblica de España, 2008 Utilizada con permiso