ZACARÍAS 11:1-6
ZACARÍAS 11:1-6 BLP
Abre, Líbano, tus puertas y que el fuego devore tus cedros. Gime, ciprés, de dolor, porque ha caído el cedro y han sido abatidos los poderosos. Lamentaos, encinas de Basán, porque han talado el bosque impenetrable. Oíd el lamento de los pastores porque ha sido arrancado el esplendor de sus praderas; Escuchad cómo rugen los cachorros de león porque ha sido asolada la espesura del Jordán. Así dice el Señor, mi Dios: —Apacienta estas ovejas destinadas al matadero, las que degüellan impunemente sus compradores mientras dice el que las vende: «Bendito sea el Señor que me ha hecho rico». Ni sus propios pastores se compadecen de ellas. Pues bien, tampoco yo tendré compasión de los que habitan esta tierra —oráculo del Señor—; voy a entregar a todos y cada uno a merced de sus vecinos y de sus reyes que devastarán el país sin que yo los libre de sus manos.