SALMOS 37:16-30
SALMOS 37:16-30 BLP
Es mejor la pobreza de un justo que la riqueza de muchos malvados; el poder del malvado se desvanece, mientras el Señor protege a los justos. El Señor conoce la vida de los buenos y su herencia durará por siempre. No serán defraudados en tiempo adverso, en tiempo de hambre quedarán saciados. Pero los malvados desaparecerán, los enemigos del Señor se extinguirán como el verdor del prado, se esfumarán como el humo. El malvado toma prestado y no devuelve, el justo es compasivo y dadivoso. Los que el Señor bendice heredarán la tierra, los que maldice serán aniquilados. El Señor afianza los pasos del ser humano y en su conducta se complace. Aunque caiga, no quedará postrado, porque el Señor sostiene su mano. Fui joven, soy ya viejo, pero nunca vi a un justo abandonado ni a sus hijos pidiendo pan. El justo es siempre compasivo y presta, ¡bendito sea su linaje! Apártate del mal, haz el bien y por siempre tendrás una morada. Porque el Señor ama el derecho y no abandona a sus fieles; en todo momento los protege y extermina el linaje de los malvados. Los justos poseerán la tierra y habitarán en ella por siempre. La boca del justo vierte sabiduría, su lengua proclama la justicia.