JUAN 18:29-40
JUAN 18:29-40 BLP
Por eso tuvo que salir Pilato para preguntarles: —¿De qué acusáis a este hombre? Ellos le contestaron: —Si no fuese un criminal, no te lo habríamos entregado. Pilato les dijo: —Muy bien, lleváoslo y juzgadlo según vuestra ley. Los judíos replicaron: —Nosotros no tenemos autoridad para dar muerte a nadie. Y es que tenía que cumplirse lo que Jesús había anunciado sobre la clase de muerte que iba a sufrir. Entonces Pilato volvió a entrar en su palacio, mandó traer a Jesús y le preguntó: —¿Eres tú el rey de los judíos? Contestó Jesús: —¿Me haces esa pregunta por tu cuenta o te la han sugerido otros? Pilato replicó: —¿Acaso soy yo judío? Son los de tu propia nación y los jefes de los sacerdotes los que te han entregado a mí. ¿Qué es lo que has hecho? Jesús respondió: —Mi reino no es de este mundo. Si lo fuera, mis servidores habrían luchado para librarme de los judíos. Pero no, mi reino no es de este mundo. Pilato insistió: —Entonces, ¿eres rey? Jesús le respondió: —Soy rey, como tú dices. Y mi misión consiste en dar testimonio de la verdad. Precisamente para eso nací y para eso vine al mundo. Todo el que ama la verdad escucha mi voz. Pilato repuso: —¿Y qué es la verdad? Dicho esto, Pilato salió de nuevo y dijo a los judíos: —Yo no encuentro delito alguno en este hombre. Pero como tenéis la costumbre de que durante la fiesta de la Pascua os ponga en libertad a un preso, ¿queréis que deje en libertad al rey de los judíos? Ellos, entonces, se pusieron de nuevo a gritar: —¡No, a ese no! ¡Deja en libertad a Barrabás! (El tal Barrabás era un bandido).