ÉXODO 35:4-29
ÉXODO 35:4-29 BLP
Moisés dijo a toda la comunidad de los israelitas: Esto es lo que ordena el Señor: Recoged entre vosotros una ofrenda para el Señor. El que quiera ser generoso que traiga para el Señor oro, plata, bronce; lana teñida de púrpura violeta, escarlata y carmesí, lino fino y pelo de cabra; pieles de carnero curtidas, pieles de marsopa, madera de acacia; aceite para la lámpara, especias para el aceite de la unción y para el incienso aromático; piedras de ónice y piedras de engaste para el efod y el pectoral. Todo aquel que tenga habilidades especiales, que las ponga al servicio del Señor para hacer lo que él ha mandado: la Morada, su Tienda y lo que la recubre, sus ganchos, sus tablones, sus varales, sus columnas y sus basas; el Arca y sus varales, su cubierta y el velo que sirve de separación; la mesa con sus varales y todos sus utensilios junto con los panes de la ofrenda; el candelabro, con sus accesorios y sus lámparas y el aceite para el alumbrado; el altar del incienso y sus varales, el aceite de la unción, el incienso aromático y la cortina para la entrada de la Morada; el altar de los holocaustos con su enrejado de bronce, sus varales y todos sus utensilios; la pila con su base; las cortinas del atrio, con sus columnas y basas, la cortina que hace las veces de puerta del atrio; los tableros de la Morada y del atrio, con sus cuerdas; las vestiduras de ceremonia para oficiar en el santuario, las vestiduras sagradas del sacerdote Aarón y las vestiduras que usarán sus hijos cuando oficien como sacerdotes. Entonces, la comunidad de los israelitas se retiró de la presencia de Moisés; todos los que se sintieron movidos por un impulso de generosidad volvieron con ofrendas al Señor para que se construyera la Tienda del encuentro, para todo su servicio y para las vestiduras sagradas. Y vinieron hombres y mujeres trayendo de corazón broches, pendientes, anillos, brazaletes, y toda clase de alhajas de oro; y cada uno presentaba ritualmente ante el Señor su ofrenda de oro. Los que tenían púrpura violeta, escarlata o carmesí, o lino fino o pelo de cabra, o pieles de carnero curtidas o pieles de marsopa, lo traían. Los que podían ofrendar objetos de plata o bronce, los donaban voluntariamente como ofrenda al Señor; y los que disponían de madera de acacia, útil para cualquier trabajo manual, también la traían. Las mujeres con habilidad para tejer traían sus tejidos hechos a mano de color violeta, escarlata o carmesí y también lino fino; y otras mujeres, que conocían bien el oficio, se ofrecieron voluntariamente a tejer el pelo de cabra. Los principales del pueblo aportaron piedras de ónice y otras piedras preciosas para el engaste del efod y el pectoral; aportaron también especias, aceite para las lámparas y para la unción e incienso aromático. Tanto los hombres como las mujeres que sintieron el impulso de ayudar libremente en la obra que el Señor había ordenado a Moisés, trajeron su ofrenda voluntariamente al Señor.