1 REYES 14:1-9
1 REYES 14:1-9 BLP
En aquellos días cayó enfermo Abías, el hijo de Jeroboán, y este dijo a su mujer: —Anda, disfrázate, para que nadie sepa que eres mi mujer, y vete a Siló, donde vive el profeta Ajías, el que me anunció que sería rey de este pueblo. Llévale diez panes, unas tortas y un tarro de miel, y preséntate a él, pues él te dirá lo que le sucederá al niño. La mujer de Jeroboán lo hizo así; se preparó, marchó a Siló y llegó a la casa de Ajías. Aunque Ajías no podía ver, pues estaba casi ciego a causa de la vejez, el Señor le había advertido: —Va a venir la mujer de Jeroboán a consultarte sobre su hijo, que está enfermo. Ella vendrá disfrazada y tú le dirás esto y esto. Cuando Ajías escuchó el ruido de sus pasos al entrar por la puerta, dijo: —Pasa, mujer de Jeroboán. ¿Por qué te haces pasar por otra? Tengo que darte malas noticias. Ve y di a Jeroboán: «Esto dice el Señor: Yo te saqué de en medio del pueblo y te convertí en jefe de mi pueblo Israel. Yo le quité el reino a la dinastía de David para dártelo a ti. Pero tú no te has parecido a mi siervo David, que guardó mis mandamientos y me siguió de corazón actuando correctamente ante mí. Al contrario, te has portado peor que todos tus antecesores, pues has llegado a fabricarte dioses distintos e ídolos para ofenderme, mientras a mí me volvías la espalda.