Salmo 52:1-9
Salmo 52:1-9 NVI
¿Prepotente, por qué te jactas de tu maldad? ¡El amor de Dios es constante! Tu lengua, como navaja afilada, trama destrucción y practica el engaño. Más que el bien, amas la maldad; más que la verdad, amas la mentira. Selah Lengua embustera, te encanta ofender con tus palabras. Pero Dios te arruinará para siempre; te tomará y te arrojará de tu hogar; ¡te arrancará del mundo de los vivos! Selah Los justos verán esto, y temerán; entre burlas dirán de él: «¡Aquí tenéis al hombre que no buscó refugio en Dios, sino que confió en su gran riqueza y se afirmó en su maldad!» Pero yo soy como un olivo verde que florece en la casa de Dios; yo confío en el gran amor de Dios eternamente y para siempre. En todo tiempo te alabaré por tus obras; en ti pondré mi esperanza en presencia de tus fieles, porque tu nombre es bueno.