1 Corintios 11:28-32
1 Corintios 11:28-32 NVI
Así que cada uno debe examinarse a sí mismo antes de comer el pan y beber de la copa. Porque el que come y bebe sin discernir el cuerpo come y bebe su propia condena. Por eso hay entre vosotros muchos débiles y enfermos, e incluso varios han muerto. Si nos examináramos a nosotros mismos, no se nos juzgaría; pero, si nos juzga el Señor, nos disciplina para que no seamos condenados con el mundo.