Huellas Eternas Producciones

Isaías 49:16 dice: "He aquí que en las palmas te tengo esculpida:
delante de mí están siempre tus muros".

¿Qué siente cuando ve la imagen que le comparto hoy?
Hay algunos días, más que otros, en los que deseamos estar así, escondidos en las manos de Dios, nuestro Padre; impotencias, situaciones ajenas a nosotros pero que nos involucran; personas negativas y egoístas que necesitan demostrarse que solo ellos hacen las cosas siempre bien, mirar alrededor y no tener en quien confiar para contarles lo que vivimos; todo eso genera una necesidad de escapar de todo; no siempre se puede, pero si hay un lugar donde siempre podemos ir, es a los Brazos del Padre, permitir que nos abrace y nos comience a llenar de paz.
Dios puede llevarse todas nuestras cargas, nuestras impotencias y toda la incomprensión que recibimos; rodeándonos con sus brazos de Amor, nos comprende; nos conoce y como me sucedió una vez cuando estaba comenzando una prueba muy difícil en mi vida; le pregunté: Señor ¿Por que yo, en medio de tanta gente? Y me morí de emoción y de amor; me dijo: Porque confío en ti.
¡Dios mío! ¿Cómo puede confiar en mí, si ni yo misma confío?
Dios ve las cosas de otra manera; porque no ve solo una parte de lo que nos pasa, Él es Dios y lo ve todo; ve su parte más la visión completa de lo que pasa y además, algo que nosotros no podemos, Él ve el final de la historia; ve lo que pasamos y sabe como va a terminar todo. Porque tarde o temprano, todo tiene su final.
La protección de Dios es tan maravillosa, Él además nos defiende, mientras nos esconde en el hueco de SU MANO, el único lugar seguro en la vida.
¿Cómo acceder a ese lugar seguro? Por medio de la maravillosa herramienta que Jesús nos dio; por medio de la oración, la búsqueda de la Presencia del Espíritu Santo.
Cuando nos acercamos a Él atribulados, nos envuelve con su abrazo, nos hace sentir en nuestro corazón el Amor de Dios y se lleva todas nuestras cargas; nuestra mente comienza a soltar todo lo desagradable y comienza a ser llena de paz.
Leamos juntos esta Palabra, hágala suya, no la olvide, es para usted.
"El Señor es quien me ayuda:
por eso no me hieren los insultos;
por eso me mantengo firme como una roca,
pues sé que no quedaré en ridículo.
A mi lado está mi defensor:
¿Alguien tiene algo en mi contra?
¡Vayamos juntos ante el juez!
¿Alguien se cree con derecho a acusarme?
¡Que venga y me lo diga!
El Señor es quien me ayuda;
¿quién podrá condenarme?
Todos mis enemigos desaparecerán
como vestido comido por la polilla.
Ustedes que honran al Señor
y escuchan la voz de su siervo:
si caminan en la oscuridad,
sin un rayo de luz,
pongan su confianza en el Señor;
apóyense en su Dios".
Isaías 50:7-10. DHH.

Usted no está solo, si confía en Dios, Él no lo va a defraudar, nunca le dará la espalda, siempre está atento a lo que le pasa; porque LO AMA MUCHO, usted es muy importante para Él, aunque usted mismo no se valore; nada menos que DIOS QUE TODO LO SABE, lo Ama y lo defiende SIEMPRE.
No tema, no está solo, Jesús no entregó en vano su vida en la cruz por Amor a usted, Él siempre estará a su lado, si usted lo permite y siempre le dará la victoria.

DIOS ES Y SERÁ SIEMPRE FIEL
Busque su Presencia en oración y adoración cada día
y nunca estará solo.

Dios lo bendiga
Susana Goglián

"POR EL PODER DE TU AMOR"
Ingrid Rosario
https://youtu.be/svQVV-2YzLY

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