HECHOS 16:27-28
HECHOS 16:27-28 TCB
El carcelero se despertó y vio que las puertas de la cárcel estaban abiertas; sacó entonces su espada para suicidarse, pensando que los prisioneros se habían escapado. Pero Pablo gritó muy alto: – ¡No te hagas daño, porque estamos todos aquí!