¿Te sientes preparado?

Sólo algunas citas de este episodio de Los Elegidos. Jesús y Juan (el que abra camino) están conversando.

"¿Te sientes preparado?".

"La preparación no facilita las cosas...".

"Se está haciendo realidad todo aquello para lo que nos hemos preparado".

A lo largo de la Biblia, ves a personas que dicen "Heme aquí". Es muy extenso por ahora, pero si realizas una búsqueda sobre ello, te encontrarás con toda una serie de personas. El joven Samuel, por ejemplo, o José. ¿O qué me dices de Isaías? O Ananías, otro ejemplo, pero del Nuevo Testamento. Son personas que respondieron cuando fueron llamadas. Se declararon "preparados" para su tarea.

"Heme aquí".

"Dímelo tú".

Eso empieza, por supuesto, por tener los oídos bien abiertos. ¿Oyes cuando alguien te necesita? Y para aplicarlo directamente a Dios y a cómo quiere utilizarte, ¿oyes Su voz? ¿Estás "sintonizado" con Él?

Y cuando oyes Su voz, ¿cuál es tu reacción? ¿Estás preparado? ¿Estás disponible? ¿Y cómo te posicionas al respecto? ¿Puede Dios pedirte algo que te saque de tu "zona de confort"?

A todas las personas que acabo de mencionar se les encomendó una tarea difícil, por la cual tuvieron que "salir". Es una buena pregunta que puedes hacerte.

El título de este día es "¿Te sientes preparado?". No creo que ninguna de las personas de la fila de arriba se 'sintiera preparada'. A menudo, hacer una tarea difícil no 'se siente' bien. Sientes una resistencia absoluta en tu interior. A veces sabes que, aunque hagas lo correcto, te estás metiendo en un lío. ¿Qué haces entonces?

Por medio de Hebreos 10, sabemos que los versículos del Salmo 40 también se refieren al Señor Jesús. Él también dijo "Heme aquí", envíame a Mí. Pero, ¿crees que Él se sentía "preparado"? ¿Qué crees que pensaba cuando vio la cruz? Sabía lo que iba a suceder. Y aun asi fue. Con confianza y obediencia.

¿Te sientes preparado?

Puede que sí, o puede que no.

Estar preparado no lo hace más fácil.

¿Te atreves a ir con confianza y obediencia?

"Gracias Señor, por completar Tu obra para mí, aunque haya sido tan difícil y tan dura".

Reflexiona sobre las siguientes preguntas:

• ¿Hay algo que el Señor te pida hoy?
• Si no se te ocurre nada, ¿cuál sería tu actitud si el Señor te diera un encargo ahora mismo?
• ¿Hasta dónde vas por Él? ¿Qué límites estableces?

Ora: "Señor, hoy sólo quiero decirte que estoy aquí. Estoy dispuesto Señor. Con eso digo que no sé realmente lo que estoy diciendo - pero confío en Ti. Muéstrame Señor lo que puedo hacer hoy por Ti. Aquí estoy. Estoy dispuesto a lo que Tú quieras darme. Ayúdame Señor a escucharte cuando me hables. Amén".