Entre NubesMuestra

Sigues amándome

Quien no se ha sentido traicionado alguna vez?

Sea la traición que sea por mas pequeña que parezca siempre crea esa sensación incómoda dentro de nosotros. Cuando nos traicionan es difícil volver a confiar en esa persona o en ese algo que nos jugo en contra. Como cuando destapas una botella de refresco y dispara sobre ti toda la soda, no quieres intentar abrirla de nuevo o vas tarde para la iglesia y de repente por alguna razón frenas de emergencia y el café encuentra en tu camisa un mejor lugar para acompañarte junto con el “make up” de tu esposa que ahora se encuentra fuera del lugar que le correspondía estar, como nos a pasado en algunas ocasiones a Jessica mi esposa y a mi.

Creas ese habito de hacer que estos episodios no se repitan. Por que piensas que en algún momento volverá a pasar lo mismo o volverán a traicionarte y es valido pensar así, por que no queremos estar todo el tiempo en el "spot" derramando la soda en la mesa ni llegar a algún lugar todo manchado. Pero no te has puesto a pensar que tal vez Dios por medio de su hijo Jesus estuvo dispuesto a estar manchado y quedar en el “spot” por delitos que no cometió, intentemos mirar desde el punto de vista de Dios, que es lo que cada día lo impulsa para querer amarnos por encima de nuestras faltas sabiendo que podemos traicionarlo nuevamente

Si consideramos el perdonar con nuestra capacidad de amar, en algún rincón de nuestro corazón encontraremos una excusa para darle fin a ese impulso, pero el perdón y el amor de Dios es sin límites. Jeremías estando en un momento de crisis dijo: “El fiel amor del SEÑOR nunca termina; su compasión no tiene fin, cada mañana se renuevan. ¡Inmensa es su fidelidad!” Dándonos a entender claramente que el amor de Dios va por encima de cualquier falta. Por encima de toda infidelidad. El significado de ser fiel es tener la virtud de mantener vigente una promesa. Y esa promesa es amarte, promesa que Dios hoy a renovado para ti, con la intención de que siempre recuerdes que Él SIGUE AMANDOTE.

¿Crees que has fallado demasiado como para alejar a Dios?

Te has preguntado ¿porqué Dios Sigue amándote?

Vales demasiado para él l.