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Salir de la trampa

Observaba mientras sus ojos examinaban el cuarto, absorbiendo todo. Comenzó a moverse nerviosamente en su asiento, y yo podía percibir que necesitaba sentirse cómoda consigo misma. Estoy segura que se preguntaba cosas que los adolescentes y adultos solemos preguntamos:

¿Qué pensarán de mi?

Estoy segura que tiene otras amigas, y varias mejores amigas.

Probablemente puede comer lo que quiera sin subir de peso.

Inconscientemente estaba midiendo su valor con un metro invisible. Su valor se basaba entre lo que ella percibía de sí misma comparado con lo que veía en otros, cuando realmente debía enfocarse en lo que Dios dice de ella. Claro, ella no es la única culpable de caer en la trampa de la comparación. ¿No lo hacemos todos constantemente?

Tomemos una mañana de domingo, por ejemplo. Puede que hayas comenzado el día sientiéndote bien acerca de tu apariencia justo antes de salir de casa hacia la iglesia. Mientras caminas a tu asiento, ves a una amiga querida sentada del otro lado del pasillo. Se ve fabulosa, como siempre. ¿Qué pasa si caen presa de su carne? ¿Qué pasa si se tropiezan y pecan?

De pronto, tu "bien" se convierte en "no tan bien". Hasta que volteas para saludar a la persona que está sentada detrás tuyo, que parece tener un día fatal. Su bebé acaba de vomitar su blusa, que tiene puesta al revés, y su niño pequeño tira de su falda. Ahora tu "no tan bien" se convierte en "bastante bien", y caíste en la trampa de la comparación otra vez.

Caemos en la trampa sin importar el tema, desde la salud y el estado físico hasta la moda, desde la educación a las aptitudes deportivas, y desde las relaciones hasta los roles que desempeñamos. En lugar de simplemente aceptar quien somos, hechos por Dios, y ubicados donde Él quiere usarnos, estamos ocupados preguntándonos si lo que los otros tienen es mejor. Es realmente un insulto a Dios nuestro Creador, ¿no crees? ¿Qué te parecería dejar de compararte y comenzar a vivir bien en nuestra propia piel?

Atrapa y transforma

1. ¿En qué trampa de comparación caes más frecuentemente?

2. ¿Qué puedes hacer para evitar esa trampa en el futuro?

3. ¿Qué pasos puedes tomar para aceptar la forma en que Dios te hizo y la vida que te dio?