2 Crónicas 28:1-8
2 Crónicas 28:1-8 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Acaz tenía veinte años cuando comenzó a reinar; reinó en Jerusalén dieciséis años. Pero, a diferencia de su antepasado David, Acaz no hizo lo que agrada al SEÑOR. Al contrario, siguió el mal ejemplo de los reyes de Israel. También hizo imágenes fundidas de los baales. Así mismo, quemó incienso en el valle de Ben Hinón y sacrificó en el fuego a sus hijos, según las repugnantes ceremonias de las naciones que el SEÑOR había expulsado al paso de los israelitas. También ofrecía sacrificios y quemaba incienso en los altares paganos, en las colinas y bajo todo árbol frondoso. Por eso el SEÑOR su Dios lo entregó al poder del rey de Aram. Los arameos lo derrotaron y capturaron una gran cantidad de prisioneros que se llevaron a Damasco. Acaz también cayó en poder del rey de Israel, quien le infligió una gran derrota. En un solo día, Pécaj, hijo de Remalías, mató en Judá a ciento veinte mil hombres, todos ellos soldados valientes, porque los habitantes de Judá habían abandonado al SEÑOR, Dios de sus antepasados. Zicrí, un guerrero de Efraín, mató a Maseías, hijo del rey, a Azricán, oficial encargado del palacio, y a Elcaná, que era el oficial más importante después del rey. De entre sus hermanos de Judá, los israelitas capturaron a doscientas mil personas, incluyendo a mujeres, niños y niñas. Además, se apoderaron de un enorme botín, que se llevaron a Samaria.
2 Crónicas 28:1-8 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Ahaz tenía veinte años de edad cuando comenzó a gobernar sobre Judá. La capital de su reino fue Jerusalén, y su reinado duró dieciséis años. Pero Ahaz no obedeció a Dios, como sí lo había hecho el rey David. Al contrario, Ahaz siguió el mal ejemplo de los reyes de Israel, pues hizo imágenes de dioses falsos, y en su honor quemó incienso en el valle de Ben-hinom. ¡Incluso quemó a sus hijos y los ofreció en sacrificio! Esa era la vergonzosa costumbre de los países que Dios había echado lejos de los israelitas. Ahaz mismo ofrecía sacrificios y quemaba incienso tanto en las colinas como debajo de los árboles en donde se adoraba a los dioses falsos. Por esta terrible desobediencia, Dios permitió que el rey de Siria conquistara Judá y se llevara muchos prisioneros a Damasco. También Dios dejó que el rey de Israel los derrotara y matara a mucha gente. En un solo día, Pécah hijo de Remalías mató a ciento veinte mil hombres valientes de Judá. Un soldado de la tribu de Efraín, que se llamaba Zicrí, mató a Maaseías, el hijo del rey. También mató a Azricam, que era el jefe del palacio, y a Elcaná, que era el asistente del rey con mayor autoridad en el reino. Contando a las mujeres y a los niños, los soldados de Israel se llevaron prisioneras a doscientas mil personas de Judá; además, les quitaron muchísimas cosas y se las llevaron a Samaria.
2 Crónicas 28:1-8 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Ajaz tenía veinte años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén dieciséis años; pero, a diferencia de su antepasado David, no hizo lo recto a los ojos del Señor, sino que siguió el mal ejemplo de los reyes de Israel y, además, hizo imágenes fundidas en honor de los baales, quemó incienso en el valle de Ben Jinón, y hasta ofreció a sus hijos en holocausto, siguiendo las repugnantes prácticas de las naciones que el Señor había arrojado de la presencia de los israelitas. Así mismo, ofreció sacrificios y quemó incienso en los lugares altos, en las colinas y debajo de todo árbol frondoso. Por eso el Señor su Dios lo dejó caer en manos del rey de Siria, y los sirios lo derrotaron y lo llevaron a Damasco, junto con un gran número de prisioneros. Ajaz también cayó en manos del rey de Israel, el cual lo derrotó y le causó gran mortandad. Por haberse apartado del Señor, el Dios de sus padres, en un solo día Pecaj hijo de Remalías mató en Judá a ciento veinte mil valientes. De igual manera Zicri, que era un efrainita muy aguerrido, dio muerte a Maseías, que era hijo del rey; a Azricán, que era su mayordomo; y a Elcana, segundo en poder después del rey. Los israelitas también tomaron cautivos a doscientos mil de sus parientes, además de mujeres, niños y niñas, y de arrebatarles un gran botín de guerra que se llevaron a Samaria.
2 Crónicas 28:1-8 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Ahaz tenía veinte años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén dieciséis años; pero sus hechos no fueron rectos a los ojos del Señor, como los de su antepasado David, sino que siguió los pasos de los reyes de Israel, y también hizo estatuas de metal fundido que representaban a Baal, quemó incienso en el valle de Ben-hinom e hizo quemar a sus hijos en sacrificio, conforme a las prácticas infames de las naciones que el Señor había arrojado de la presencia de los israelitas. Además ofreció sacrificios y quemó incienso en los santuarios paganos, en las colinas y bajo todo árbol frondoso. Por ese motivo, el Señor su Dios lo entregó en manos del rey de Siria, y los sirios lo derrotaron y le hicieron gran número de prisioneros que se llevaron a Damasco. También lo entregó el Señor en manos del rey de Israel, que le causó una gran derrota. En efecto, Pécah, hijo de Remalías, mató en Judá, en un solo día, ciento veinte mil hombres, todos ellos hombres de gran valor, por haber abandonado al Señor, Dios de sus antepasados. Y Zicrí, un guerrero de Efraín, mató a Maaseías, hijo del rey, a Azricam, jefe de palacio, y a Elcaná, primer oficial del rey. Además, los soldados de Israel hicieron prisioneras a doscientas mil personas de Judá, entre mujeres, niños y niñas, y se apoderaron de muchas cosas y se las llevaron a Samaria.
2 Crónicas 28:1-8 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
De veinte años era Acaz cuando comenzó a reinar, y dieciséis años reinó en Jerusalén; mas no hizo lo recto ante los ojos de Jehová, como David su padre. Antes anduvo en los caminos de los reyes de Israel, y además hizo imágenes fundidas a los baales. Quemó también incienso en el valle de los hijos de Hinom, e hizo pasar a sus hijos por fuego, conforme a las abominaciones de las naciones que Jehová había arrojado de la presencia de los hijos de Israel. Asimismo sacrificó y quemó incienso en los lugares altos, en los collados, y debajo de todo árbol frondoso. Por lo cual Jehová su Dios lo entregó en manos del rey de los sirios, los cuales lo derrotaron, y le tomaron gran número de prisioneros que llevaron a Damasco. Fue también entregado en manos del rey de Israel, el cual lo batió con gran mortandad. Porque Peka hijo de Remalías mató en Judá en un día ciento veinte mil hombres valientes, por cuanto habían dejado a Jehová el Dios de sus padres. Asimismo Zicri, hombre poderoso de Efraín, mató a Maasías hijo del rey, a Azricam su mayordomo, y a Elcana, segundo después del rey. También los hijos de Israel tomaron cautivos de sus hermanos a doscientos mil, mujeres, muchachos y muchachas, además de haber tomado de ellos mucho botín que llevaron a Samaria.
2 Crónicas 28:1-8 La Biblia de las Américas (LBLA)
Acaz tenía veinte años cuando comenzó a reinar, y reinó dieciséis años en Jerusalén; pero no hizo lo recto ante los ojos del SEÑOR como su padre David había hecho, sino que anduvo en los caminos de los reyes de Israel; también hizo imágenes fundidas para los baales. Quemó además incienso en el valle de Ben-hinom, e hizo pasar a sus hijos por fuego, conforme a las abominaciones de las naciones que el SEÑOR había arrojado de delante de los hijos de Israel. Y sacrificó y quemó incienso en los lugares altos, en los montes y debajo de todo árbol frondoso. Por lo cual el SEÑOR su Dios lo entregó en manos del rey de los arameos, que lo derrotaron, tomaron de él gran número de cautivos y los llevaron a Damasco. Y también él fue entregado en manos del rey de Israel, el cual lo hirió con gran mortandad. Porque Peka, hijo de Remalías, mató en Judá a ciento veinte mil en un día, todos hombres valientes, porque habían abandonado al SEÑOR, Dios de sus padres. Y Zicri, hombre poderoso de Efraín, mató a Maasías, hijo del rey, y a Azricam, mayordomo de la casa, y a Elcana, segundo después del rey. Y los hijos de Israel se llevaron cautivos de sus hermanos a doscientos mil, mujeres, hijos e hijas; y tomaron también mucho botín de ellos y se llevaron el botín a Samaria.
2 Crónicas 28:1-8 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Acaz tenía veinte años cuando subió al trono y reinó en Jerusalén dieciséis años. Él no hizo lo que era agradable a los ojos del SEÑOR, como sí lo había hecho su antepasado David. En cambio, siguió el ejemplo de los reyes de Israel. Fundió imágenes de metal para rendir culto a Baal. Ofreció sacrificios en el valle de Ben-hinom y hasta sacrificó a sus hijos en el fuego. De esta manera, siguió las prácticas detestables de las naciones paganas que el SEÑOR había expulsado de la tierra al paso de los israelitas. Ofreció sacrificios y quemó incienso en los santuarios paganos, en las colinas y debajo de todo árbol frondoso. Por todo eso, el SEÑOR su Dios permitió al rey de Aram que derrotara a Acaz y que desterrara a Damasco a un gran número de habitantes de su pueblo. Los ejércitos del rey de Israel también derrotaron a Acaz y causaron muchas bajas en su ejército. En un solo día Peka, hijo de Remalías y rey de Israel, mató a ciento veinte mil soldados de Judá —todos ellos guerreros con experiencia—, porque habían abandonado al SEÑOR, Dios de sus antepasados. Luego Zicri, un guerrero de Efraín, mató a Maaseías, el hijo del rey; a Azricam, el comandante del palacio del rey; y a Elcana, el segundo en autoridad después del rey. Los ejércitos de Israel capturaron a mujeres y niños de Judá, un total de doscientos mil, también tomaron un enorme botín, y se llevaron todo a Samaria.