1 Tesalonicenses 5:5-11
1 Tesalonicenses 5:5-11 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Todos ustedes son hijos de la luz y del día. No somos de la noche ni de la oscuridad. Por lo tanto, no debemos dormirnos como los demás, sino mantenernos alerta y en nuestro sano juicio. Los que duermen, de noche duermen, y los que se emborrachan, de noche se emborrachan. Nosotros que somos del día, por el contrario, estemos siempre en nuestro sano juicio, protegidos por la coraza de la fe y del amor, y por el casco de la esperanza de salvación; pues Dios no nos destinó a sufrir el castigo, sino a recibir la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo. Él murió por nosotros para que, en la vida o en la muerte, vivamos junto con él. Por eso, anímense y edifíquense unos a otros, tal como lo vienen haciendo.
1 Tesalonicenses 5:5-11 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Todos ustedes confían en el Señor Jesús, y eso es como vivir a plena luz del día, y no en la oscuridad. Por eso, debemos mantenernos alerta y vivir correctamente, y no tan despreocupados como viven algunos. Los que viven pecando y emborrachándose, y sin preocuparse por el regreso del Señor Jesús, realmente viven en la oscuridad. Pero nosotros no vivimos en la oscuridad, sino en la luz. Por eso debemos mantenernos alerta, y confiar en Dios y amar a toda persona. ¡Nuestra confianza y nuestro amor nos pueden proteger del pecado como una armadura! Y si no dudamos nunca de nuestra salvación, esa seguridad nos protegerá como un casco. Porque Dios no nos ha llamado para castigarnos, sino para que recibamos la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo. Porque Jesucristo murió por nosotros para que podamos vivir con él, ya sea que estemos vivos o muertos cuando él vuelva. Por eso, anímense los unos a los otros, y ayúdense a fortalecer su vida cristiana, como ya lo están haciendo.
1 Tesalonicenses 5:5-11 Reina Valera Contemporánea (RVC)
sino que todos ustedes son hijos de la luz e hijos del día. No somos de la noche ni de la oscuridad, así que no durmamos como los demás, sino mantengámonos atentos y sobrios. Los que duermen, de noche duermen; los que se embriagan, de noche se embriagan; pero nosotros, los que somos del día, debemos ser sobrios, ya que nos hemos revestido de la coraza de la fe y del amor, y tenemos como casco la esperanza de la salvación. Dios no nos ha puesto para sufrir el castigo, sino para alcanzar la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que, despiertos o dormidos, vivamos unidos a él. Por lo tanto, anímense y edifíquense unos a otros, como en efecto ya lo hacen.
1 Tesalonicenses 5:5-11 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Todos ustedes son de la luz y del día. No somos de la noche ni de la oscuridad; por eso no debemos dormir como los otros, sino mantenernos despiertos y en nuestro sano juicio. Los que duermen, duermen de noche, y los que se emborrachan, se emborrachan de noche; pero nosotros, que somos del día, debemos estar siempre en nuestro sano juicio. Debemos protegernos, como con una coraza, con la fe y el amor, y cubrirnos, como con un casco, con la esperanza de la salvación. Porque Dios no nos destinó a recibir el castigo, sino a alcanzar la salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo. Jesucristo murió por nosotros, para que, ya sea que sigamos despiertos o que nos durmamos con el sueño de la muerte, vivamos juntamente con él. Por eso, anímense y fortalézcanse unos a otros, tal como ya lo están haciendo.
1 Tesalonicenses 5:5-11 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas. Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios. Pues los que duermen, de noche duermen, y los que se embriagan, de noche se embriagan. Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo. Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él. Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis.
1 Tesalonicenses 5:5-11 La Biblia de las Américas (LBLA)
porque todos vosotros sois hijos de la luz e hijos del día. No somos de la noche ni de las tinieblas. Por tanto, no durmamos como los demás, sino estemos alerta y seamos sobrios. Porque los que duermen, de noche duermen, y los que se emborrachan, de noche se emborrachan. Pero puesto que nosotros somos del día, seamos sobrios, habiéndonos puesto la coraza de la fe y del amor, y por yelmo la esperanza de la salvación. Porque no nos ha destinado Dios para ira, sino para obtener salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, que murió por nosotros, para que ya sea que estemos despiertos o dormidos, vivamos juntamente con Él. Por tanto, alentaos los unos a los otros, y edificaos el uno al otro, tal como lo estáis haciendo.
1 Tesalonicenses 5:5-11 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Pues todos ustedes son hijos de la luz y del día; no pertenecemos a la oscuridad y a la noche. Así que manténganse en guardia, no dormidos como los demás. Estén alerta y lúcidos. Es en la noche cuando la gente duerme y los bebedores se emborrachan; pero los que vivimos en la luz estemos lúcidos, protegidos por la armadura de la fe y el amor, y usemos, por casco, la confianza de nuestra salvación. Pues Dios escogió salvarnos por medio de nuestro Señor Jesucristo y no derramar su enojo sobre nosotros. Cristo murió por nosotros para que —estemos vivos o muertos cuando regrese— podamos vivir con él para siempre. Así que aliéntense y edifíquense unos a otros, tal como ya lo hacen.