ZACARÍAS 14:9-11
ZACARÍAS 14:9-11 Reina Valera 2020 (RV2020)
Y el Señor será rey sobre toda la tierra. En aquel día, el Señor será único, y único será su nombre. Toda esta tierra se volverá como llanura desde Geba hasta Rimón, al sur de Jerusalén; será enaltecida y habitada en su lugar, desde la puerta de Benjamín hasta el lugar de la puerta primera y hasta la puerta del Ángulo, y desde la torre de Hananeel hasta los lagares del rey. Morarán en ella y no habrá nunca más maldición, sino que morarán confiadamente en Jerusalén.
ZACARÍAS 14:9-11 La Palabra (versión española) (BLP)
Aquel día el Señor reinará sobre toda la tierra, será el único [Dios] y único será también su nombre. Todo el país se transformará en llanura, desde Gueba hasta Rimón, al sur de Jerusalén. Se mantendrá en alto Jerusalén, y estará habitada desde la Puerta de Benjamín hasta el emplazamiento de la primitiva puerta y hasta la Puerta del Ángulo; y desde la Torre de Jananel hasta los lagares del rey. Habitarán en Jerusalén sin que se la vuelva a consagrar al exterminio, y vivirán seguros en ella.
ZACARÍAS 14:9-11 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Ese día reinará el Señor en toda la tierra. El Señor será el único, y único será también su nombre. Todo el país quedará convertido en una llanura, desde Gueba hasta Rimón, al sur de Jerusalén. Jerusalén estará en alto, y será habitada en ese lugar, desde la puerta de Benjamín hasta la puerta del Ángulo (donde antes estuvo la puerta Antigua) y desde la torre de Hananel hasta las prensas de aceite del rey. Sí, Jerusalén será habitada y no volverá a ser destruida. Sus habitantes vivirán seguros.
ZACARÍAS 14:9-11 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
El SEÑOR reinará sobre toda la tierra. En aquel día el SEÑOR será el único Dios, y su nombre será el único nombre. »Desde Gueba hasta Rimón, al sur de Jerusalén, todo el país se volverá un desierto. Pero Jerusalén se levantará y permanecerá en su lugar, desde la puerta de Benjamín hasta el sitio de la puerta Primera, hasta la puerta del Ángulo, y desde la torre de Jananel hasta los lagares del rey. Jerusalén volverá a ser habitada, tendrá tranquilidad, y nunca más será destruida.