CANTARES 2:1-6
CANTARES 2:1-6 Reina Valera 2020 (RV2020)
Yo soy la rosa de Sarón, el lirio de los valles. Como el lirio entre los espinos es mi amada entre las jóvenes. Como un manzano entre árboles silvestres es mi amado entre los jóvenes. A su sombra deseada me senté y su fruto fue dulce a mi paladar. Me llevó a la sala de banquetes y tendió sobre mí la bandera de su amor. Reconfortadme con pasas, reanimadme con manzanas, porque estoy enferma de amor. En su izquierda reposa mi cabeza, con su derecha me abraza.
CANTARES 2:1-6 La Palabra (versión española) (BLP)
Soy narciso de Sarón y azucena de los valles. Una azucena entre zarzas es mi amada entre las mozas. Un manzano entre árboles silvestres es mi amado entre los mozos. Me gusta sentarme a su sombra, paladear su dulce fruta. Me introdujo en la bodega bajo la bandera de su amor. Reconfortadme con pasas, reanimadme con manzanas, que estoy enferma de amor. En su izquierda reposa mi cabeza, con su derecha me abraza.
CANTARES 2:1-6 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Soy la flor de los llanos de Sarón, soy la rosa de los valles. Mi amada es, entre las mujeres, como una rosa entre los espinos. Mi amado es, entre los hombres, como un manzano entre los árboles del bosque. ¡Qué agradable es sentarme a su sombra! ¡Qué dulce me sabe su fruta! Me llevó a la sala de banquetes y sus miradas para mí fueron de amor. ¡Reanimadme con tortas de pasas, alimentadme con manzanas, porque me muero de amor! ¡Que ponga él su izquierda bajo mi cabeza y con su derecha me abrace!
CANTARES 2:1-6 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Yo soy una rosa de Sarón, una azucena de los valles. Como azucena entre las espinas es mi amada entre las mujeres. Cual manzano entre los árboles del bosque es mi amado entre los hombres. Me encanta sentarme a su sombra; dulce a mi paladar es su fruto. Me llevó a la sala del banquete, y sobre mí enarboló su bandera de amor. ¡Fortalecedme con pasas, sustentadme con manzanas, porque desfallezco de amor! ¡Ojalá pudiera mi cabeza reposar sobre su izquierda! ¡Ojalá su derecha me abrazara!