ROMANOS 6:14-23
ROMANOS 6:14-23 Reina Valera 2020 (RV2020)
Porque el pecado ya no tendrá dominio sobre vosotros, pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. ¿Entonces, qué diremos? ¿Pecaremos porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? ¡De ninguna manera! ¿O no sabéis que cuando os ofrecéis vosotros mismos a alguien como siervos para obedecerle, sois siervos de aquel a quien obedecéis, ya sea como siervos del pecado que lleva a la muerte o de la obediencia que lleva a la justicia? Pero gracias a Dios que, aunque erais siervos del pecado, habéis obedecido de corazón al modelo de enseñanza que os transmitieron; y una vez liberados del pecado, llegasteis a ser siervos de la justicia. En términos humanos, por la debilidad de vuestra naturaleza humana, os digo esto: del mismo modo que para practicar la iniquidad presentasteis vuestros miembros para servir a la impureza y a la maldad, así ahora para vivir en santidad presentad vuestros miembros para servir a la justicia. Cuando erais esclavos del pecado, erais libres con respecto a la justicia. ¿Pero qué fruto teníais de aquellas cosas de las que ahora os avergonzáis? Porque su fin es muerte. Pero ahora que habéis sido liberados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación y, como fin, la vida eterna. Porque la paga del pecado es muerte, pero el don de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, Señor nuestro.
ROMANOS 6:14-23 La Palabra (versión española) (BLP)
No os dejéis dominar por el pecado, ya que no estáis bajo el yugo de la ley, sino bajo la acción de la gracia. Entonces, ¿qué? Porque ya no estemos bajo el yugo de la ley, sino bajo la acción de la gracia, ¿habremos de pecar sin miramientos? ¡De ningún modo! Sabéis de sobra que, si os ponéis al servicio de alguien dispuestos a obedecerle, os convertís en sus esclavos: esclavos del pecado que os llevará a la muerte, o bien esclavos de la obediencia a Dios que os llevará a vivir correctamente. Gracias a Dios, vosotros, que erais en otro tiempo esclavos del pecado, os habéis sometido de todo corazón al modelo de enseñanza que os ha sido transmitido. Liberados del pecado, habéis aceptado vivir una vida recta. Os estoy hablando con un lenguaje corriente en atención a la debilidad de vuestra condición humana. Así pues, lo mismo que en otro tiempo os hicisteis esclavos del vicio y la maldad enfangándoos en el mal, haceos ahora esclavos de una vida recta, consagrándoos a Dios. Cuando erais esclavos del pecado, no os considerabais obligados a practicar el bien. ¿Y cuál fue el resultado? Vergüenza os da decirlo, porque todo desembocó en la muerte. Pero ahora habéis sido liberados del pecado, sois siervos de Dios, habéis sido consagrados a él y tenéis como meta la vida eterna. Porque el salario del pecado es la muerte, mientras que el don que Dios nos hace es la vida eterna por medio de Cristo Jesús, Señor nuestro.
ROMANOS 6:14-23 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Así el pecado no tendrá poder sobre vosotros, pues ya no estáis sometidos a la ley sino a la bondad de Dios. ¿Qué, pues? ¿Vamos a pecar porque no estamos sometidos a la ley sino a la bondad de Dios? ¡De ninguna manera! Sabéis muy bien que si os entregáis como esclavos a un amo para obedecerle, os hacéis esclavos de ese amo a quien obedecéis. Y esto es así, lo mismo si obedecéis al pecado, lo cual lleva a la muerte, que si obedecéis a Dios, lo cual lleva a una vida de justicia. Pero, gracias a Dios, vosotros, que antes erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a la forma de enseñanza que habéis recibido. Una vez libres de la esclavitud del pecado habéis entrado al servicio de una vida de justicia (os estoy hablando en términos humanos para que podáis entender bien estas cosas). De modo que, así como antes entregasteis vuestro cuerpo al servicio de la impureza y la maldad para hacer el mal, entregad también ahora vuestro cuerpo al servicio de una vida de justicia, para vuestra santificación. Cuando todavía erais esclavos del pecado no estabais al servicio de una vida de justicia. ¿Pero qué provecho sacasteis de aquellas cosas que ahora os avergüenzan, y que no llevan sino a la muerte? Ahora, en cambio, libres de la esclavitud del pecado habéis entrado al servicio de Dios. Y el provechoso resultado de esto es vuestra santificación, y finalmente la vida eterna. El pago que da el pecado es la muerte, pero el don de Dios es vida eterna en unión con Cristo Jesús, nuestro Señor.
ROMANOS 6:14-23 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Así el pecado no tendrá dominio sobre vosotros, porque ya no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia. Entonces, ¿qué? ¿Vamos a pecar porque no estamos ya bajo la ley, sino bajo la gracia? ¡De ninguna manera! ¿Acaso no sabéis que, cuando os entregáis a alguien para obedecerlo, sois esclavos de aquel a quien obedecéis? Claro que lo sois, ya sea del pecado que lleva a la muerte, o de la obediencia que lleva a la justicia. Pero gracias a Dios que, aunque antes erais esclavos del pecado, ya os habéis sometido de corazón a la enseñanza que os fue transmitida. En efecto, habiendo sido liberados del pecado, ahora sois esclavos de la justicia. Hablo en términos humanos, por las limitaciones de vuestra naturaleza humana. Antes ofrecíais los miembros de vuestro cuerpo para servir a la impureza, que lleva más y más a la maldad; ofrecedlos ahora para servir a la justicia que lleva a la santidad. Cuando vosotros erais esclavos del pecado, estabais libres del dominio de la justicia. ¿Qué fruto cosechabais entonces? ¡Cosas que ahora os avergüenzan y que conducen a la muerte! Pero ahora que habéis sido liberados del pecado y os habéis puesto al servicio de Dios, cosecháis la santidad que conduce a la vida eterna. Porque la paga del pecado es muerte, mientras que la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús, nuestro Señor.