ROMANOS 1:29-32
ROMANOS 1:29-32 Reina Valera 2020 (RV2020)
Están repletos de toda clase de injusticia, inmoralidad sexual, perversidad, avaricia, maldad; están llenos de envidia, homicidios, contiendas, engaños y malignidades. Son calumniadores, enemigos de Dios, insolentes, altaneros, arrogantes, inventores de maldades, desobedientes a los padres, necios, desleales, insensibles, implacables, sin misericordia. Esos, aunque conocen el juicio de Dios, que declara dignos de muerte a quienes practican tales cosas, no solo las hacen, sino que también se complacen con los que las practican.
ROMANOS 1:29-32 La Palabra (versión española) (BLP)
Rebosan injusticia, perversidad, codicia, maldad; son envidiosos, asesinos, pendencieros, embaucadores, malintencionados, chismosos, calumniadores, impíos, ultrajadores, soberbios, fanfarrones, dañinos, rebeldes para con sus padres; no tienen conciencia, ni palabra, ni corazón, ni piedad. Conocen de sobra la sentencia de Dios que declara reos de muerte a quienes hacen tales cosas y, sin embargo, no solo las hacen, sino que incluso aplauden el que otros las hagan.
ROMANOS 1:29-32 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Están llenos de toda clase de injusticia, perversidad, avaricia y maldad. Son envidiosos, asesinos, pendencieros, engañadores, perversos y chismosos. Hablan mal de los demás, son enemigos de Dios, insolentes, vanidosos y soberbios; inventan maldades, desobedecen a los padres, son insensatos, no cumplen su palabra, no tienen cariño a nadie, no perdonan, no sienten compasión. Saben muy bien que Dios ha decretado la muerte contra quienes hacen estas cosas; sin embargo las siguen haciendo, y hasta ven con gusto que otros las hagan.
ROMANOS 1:29-32 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Se han llenado de toda clase de maldad, perversidad, avaricia y depravación. Están llenos de envidia, homicidios, disensiones, engaño y malicia. Son chismosos, calumniadores, enemigos de Dios, insolentes, soberbios y arrogantes; inventores de maldades; se rebelan contra sus padres; son insensatos, desleales, insensibles, despiadados. Saben bien que, según el justo decreto de Dios, quienes practican tales cosas merecen la muerte; sin embargo, no solo siguen practicándolas, sino que incluso aprueban a quienes las practican.