SALMOS 86:1-7
SALMOS 86:1-7 La Palabra (versión española) (BLP)
Atiéndeme, Señor, escúchame, que soy humilde, pobre soy. Protégeme porque soy fiel; tú, mi Dios, salva a tu siervo que ha puesto en ti su confianza. Apiádate de mí, Dios mío, que a ti clamo sin cesar. Inunda de gozo a tu siervo, que hacia ti yo me dirijo. Tú, mi Dios, eres bueno y clemente, lleno de amor para quienes te invocan. Señor, atiende mi ruego, escucha mi voz suplicante. Cuando estoy angustiado te llamo porque tú me respondes.
SALMOS 86:1-7 Reina Valera 2020 (RV2020)
Inclina, Señor, tu oído, y escúchame, porque estoy afligido y menesteroso. Guarda mi alma, porque soy piadoso; ¡salva tú, Dios mío, a tu siervo que en ti confía! Ten misericordia de mí, Señor, porque a ti clamo todo el día. Alegra la existencia de tu siervo, porque a ti, Señor, levanto mi alma, porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, rico en misericordia con los que te invocan. Escucha, Señor, mi oración y está atento a la voz de mis ruegos. En el día de mi angustia te llamaré, porque tú me respondes.
SALMOS 86:1-7 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Atiéndeme, SEÑOR; respóndeme, pues pobre soy y estoy necesitado. Presérvame la vida, pues te soy fiel. Tú eres mi Dios, y en ti confío; ¡salva a tu siervo! Compadécete, Señor, de mí, porque a ti clamo todo el día. Reconforta el espíritu de tu siervo, porque a ti, Señor, elevo mi alma. Tú, Señor, eres bueno y perdonador; grande es tu amor por todos los que te invocan. Presta oído, SEÑOR, a mi oración; atiende a la voz de mi clamor. En el día de mi angustia te invoco, porque tú me respondes.