SALMOS 84:1-4
SALMOS 84:1-4 Reina Valera 2020 (RV2020)
¡Cuán amables son tus moradas, Señor de los ejércitos! ¡Anhela mi alma y aun ardientemente desea los atrios del Señor! ¡Mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo! Aun el gorrión halla casa, y la golondrina nido para sí, donde poner sus polluelos, cerca de tus altares, Señor de los ejércitos, Rey mío y Dios mío. ¡Dichosos los que habitan en tu Casa; perpetuamente te alabarán! Selah
SALMOS 84:1-4 La Palabra (versión española) (BLP)
¡Qué gratas son tus moradas, oh Señor del universo! Añoro y siento nostalgia de los atrios del Señor; mi corazón y mi cuerpo cantan con gozo al Dios vivo. Hasta el pájaro encuentra casa y un nido la golondrina para poner a sus crías cerca de tus altares, ¡oh Señor del universo, rey mío y Dios mío! Felices quienes moran en tu casa y te alaban sin cesar; [Pausa]
SALMOS 84:1-4 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
¡Cuán hermosas son tus moradas, SEÑOR Todopoderoso! Anhelo con el alma los atrios del SEÑOR; casi agonizo por estar en ellos. Con el corazón, con todo el cuerpo, canto alegre al Dios de la vida. SEÑOR Todopoderoso, rey mío y Dios mío, aun el gorrión halla casa cerca de tus altares; también la golondrina hace allí su nido, para poner sus polluelos. Dichoso el que habita en tu templo, pues siempre te está alabando. Selah