SALMOS 132:11-18
SALMOS 132:11-18 Reina Valera 2020 (RV2020)
En verdad juró el Señor a David y no se retractará de ello: «De tu descendencia pondré sobre tu trono. Si tus hijos guardan mi pacto y mi testimonio, que yo les enseño, sus hijos también se sentarán sobre tu trono para siempre», porque el Señor ha elegido a Sion; la quiso por morada suya. «Este es para siempre el lugar de mi reposo. Aquí habitaré, porque la he querido. Bendeciré abundantemente su provisión; a sus pobres saciaré de pan. Asimismo, vestiré de salvación a sus sacerdotes y sus santos darán voces de júbilo. Allí haré retoñar el poder de David; he dispuesto lámpara para mi ungido. A sus enemigos vestiré de confusión, pero sobre él florecerá su corona».
SALMOS 132:11-18 La Palabra (versión española) (BLP)
El Señor se lo juró a David, en verdad no va a retractarse: «A uno de tus descendientes yo pondré sobre tu trono. Si respetan tus hijos mi alianza, los mandatos que voy a enseñarles, también sus hijos se sentarán en tu trono para siempre». Porque el Señor ha escogido a Sion, la ha querido por morada suya: «Sion será mi morada para siempre, aquí residiré porque ella me complace. Bendeciré sus provisiones, colmaré de pan a los hambrientos, a sus sacerdotes vestiré de fiesta y sus fieles gritarán de alegría. Allí haré renacer el poder de David, prepararé una lámpara a mi ungido. A sus enemigos cubriré de vergüenza, a él lo coronaré de esplendor».
SALMOS 132:11-18 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
El SEÑOR le ha hecho a David un firme juramento que no revocará: «A uno de tus propios descendientes lo pondré en tu trono. Si tus hijos cumplen con mi pacto y con los estatutos que les enseñaré, también sus descendientes te sucederán en el trono para siempre». El SEÑOR ha escogido a Sión; su deseo es hacer de este monte su morada: «Este será para siempre mi lugar de reposo; aquí pondré mi trono, porque así lo deseo. Bendeciré con creces sus provisiones, y saciaré de pan a sus pobres. Revestiré de salvación a sus sacerdotes, y jubilosos cantarán sus fieles. »Aquí haré renacer el poder de David, y encenderé la lámpara de mi ungido. A sus enemigos los cubriré de vergüenza, pero él lucirá su corona esplendorosa».