SALMOS 104:19-26
SALMOS 104:19-26 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Tú hiciste la luna, que marca las estaciones, y el sol, que sabe cuándo ocultarse. Tú traes la oscuridad, y cae la noche, y en sus sombras se arrastran los animales del bosque. Los leones rugen, reclamando su presa, exigiendo que Dios les dé su alimento. Pero al salir el sol se escabullen, y vuelven a echarse en sus guaridas. Sale entonces la gente a cumplir sus tareas, a hacer su trabajo hasta el anochecer. ¡Oh SEÑOR, cuán numerosas son tus obras! ¡Todas ellas las hiciste con sabiduría! ¡Rebosa la tierra con todas tus criaturas! Allí está el mar, ancho e infinito, que abunda en animales, grandes y pequeños, cuyo número es imposible conocer. Allí navegan los barcos y se mece Leviatán, que tú creaste para jugar con él.
SALMOS 104:19-26 Reina Valera 2020 (RV2020)
Hizo la luna para los tiempos; el sol conoce su ocaso. Pones las tinieblas, y es de noche; en ella corretean todas las bestias de la selva. Los leoncillos rugen tras la presa y reclaman de Dios su comida. Sale el sol, se recogen y se echan en sus cuevas. Sale el hombre a su labor y a su labranza hasta la tarde. ¡Cuán innumerables son tus obras, Señor! Hiciste todas ellas con sabiduría; ¡la tierra está llena de tus beneficios! He allí el grande y ancho mar, en donde se mueven seres innumerables, seres pequeños y grandes. Allí lo surcan las naves; allí este Leviatán que hiciste para jugar con él.
SALMOS 104:19-26 La Palabra (versión española) (BLP)
Para marcar los tiempos hiciste la luna y el sol que sabe cuándo ocultarse. Dispones la oscuridad y cae la noche: bullen en ella los seres del bosque, rugen los leones ante la presa y piden a Dios su alimento. Sale el sol y ellos se esconden, descansan en sus madrigueras. Entonces sale el ser humano a su trabajo, a su labor que dura hasta la tarde. ¡Qué abundantes son tus obras, Señor! Con tu sabiduría las hiciste todas, la tierra está llena de tus criaturas. Aquí está el inmenso y ancho mar, allí un sinfín de animales marinos, seres pequeños y grandes; allí se deslizan los barcos y Leviatán, a quien formaste para jugar con él.