NEHEMÍAS 4:7-10
NEHEMÍAS 4:7-10 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Pero cuando Sambalat, Tobías, los árabes, los de Amón y los de Asdod supieron que la reparación de la muralla de Jerusalén seguía adelante y que se había comenzado a tapar las brechas, se enfurecieron, y todos juntos hicieron un plan para atacar Jerusalén y causar destrozos en ella. Entonces oramos a nuestro Dios, y pusimos guardia día y noche para defendernos de ellos. Y la gente de Judá decía: “La fuerza del cargador desmaya ante tal cantidad de escombros, y nosotros somos incapaces de reconstruir esta muralla.”
NEHEMÍAS 4:7-10 Reina Valera 2020 (RV2020)
Pero aconteció que oyeron Sanbalat, Tobías, los árabes, los amonitas y los de Asdod que los muros de Jerusalén eran reparados, pues ya las brechas comenzaban a ser cerradas, y se encolerizaron mucho. Conspiraron luego todos a una para venir a atacar a Jerusalén y hacerle daño. Entonces, oramos a nuestro Dios, y por causa de ellos montamos guardia contra ellos de día y de noche. Y decía Judá: —Las fuerzas de los acarreadores se han debilitado y el escombro es mucho; no podremos reconstruir el muro.
NEHEMÍAS 4:7-10 La Palabra (versión española) (BLP)
Así que coloqué al pueblo por familias con sus espadas, lanzas y arcos en las partes bajas por detrás de la muralla y en los lugares descubiertos. Inspeccioné el dispositivo, me puse en pie y dije a los nobles, a las autoridades y al resto del pueblo: —¡No temáis ante ellos! ¡Acordaos que el Señor es grande y poderoso! ¡Luchad por vuestros hermanos, hijos e hijas, por vuestras mujeres y vuestras casas! Constataron nuestros enemigos que estábamos apercibidos y que Dios había desbaratado sus planes; así que pudimos volver a las murallas, cada uno a su trabajo. Desde aquel día, la mitad de mis muchachos trabajaba en la obra y la otra mitad empuñaba lanzas, escudos, arcos y corazas, mientras los jefes todos de Judá los apoyaban incondicionalmente.
NEHEMÍAS 4:7-10 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Pero cuando Sambalat, Tobías, los árabes, los de Amón y los de Asdod supieron que la reparación de la muralla de Jerusalén seguía adelante y que se había comenzado a tapar las brechas, se enfurecieron, y todos juntos hicieron un plan para atacar Jerusalén y causar destrozos en ella. Entonces oramos a nuestro Dios, y pusimos guardia día y noche para defendernos de ellos. Y la gente de Judá decía: “La fuerza del cargador desmaya ante tal cantidad de escombros, y nosotros somos incapaces de reconstruir esta muralla.”
NEHEMÍAS 4:7-10 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Pero, cuando Sambalat y Tobías, y los árabes, los amonitas y los asdodeos se enteraron de que avanzaba la reconstrucción de la muralla y de que ya estábamos cerrando las brechas, se enojaron muchísimo y acordaron atacar Jerusalén y provocar disturbios en ella. Oramos entonces a nuestro Dios y decidimos montar guardia día y noche para defendernos de ellos. Por su parte, la gente de Judá decía: «Los cargadores desfallecen, pues son muchos los escombros; ¡no vamos a poder reconstruir esta muralla!»