MARCOS 10:46-51
MARCOS 10:46-51 Reina Valera 2020 (RV2020)
Llegaron a Jericó, y al salir de la ciudad iba acompañado de sus discípulos y una gran multitud. Sentado junto al camino estaba Bartimeo, un mendigo ciego, hijo de Timeo. Al oír Bartimeo que era Jesús el nazareno, comenzó a gritar: —¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! Y muchos le reprendían para que callara, pero él clamaba mucho más: —¡Hijo de David, ten misericordia de mí! Entonces Jesús se detuvo y mandó llamarle. Y llamaron al ciego diciéndole: —Ten confianza. Levántate, te llama. Bartimeo, arrojando su capa, se levantó y vino a Jesús. Jesús le preguntó: —¿Qué quieres que haga por ti? El ciego respondió: —Maestro, que recobre la vista.
MARCOS 10:46-51 La Palabra (versión española) (BLP)
En esto llegaron a Jericó. Y más tarde, cuando Jesús salía de allí acompañado de sus discípulos y de otra mucha gente, un ciego llamado Bartimeo (es decir, hijo de Timeo) estaba sentado junto al camino pidiendo limosna. Al enterarse de que era Jesús de Nazaret quien pasaba, empezó a gritar: —¡Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí! Muchos le decían que se callara, pero él gritaba cada vez más: —¡Hijo de David, ten compasión de mí! Entonces Jesús se detuvo y dijo: —Llamadlo. Llamaron al ciego, diciéndole: —Ten confianza, levántate, él te llama. El ciego, arrojando su capa, dio un salto y se acercó a Jesús. Jesús le preguntó: —¿Qué quieres que haga por ti? Contestó el ciego: —Maestro, que vuelva a ver.
MARCOS 10:46-51 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Llegaron a Jericó. Y cuando ya salía Jesús de la ciudad seguido de sus discípulos y de mucha gente, un mendigo ciego llamado Bartimeo, hijo de Timeo, estaba sentado junto al camino. Al oir que era Jesús de Nazaret, el ciego comenzó a gritar: –¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí! Muchos le reprendían para que se callara, pero él gritaba más aún: –¡Hijo de David, ten compasión de mí! Jesús se detuvo y dijo: –Llamadle. Llamaron al ciego y le dijeron: –Ánimo, levántate. Te está llamando. El ciego arrojó su capa, y dando un salto se acercó a Jesús, que le preguntó: –¿Qué quieres que haga por ti? El ciego le contestó: –Maestro, quiero recobrar la vista.
MARCOS 10:46-51 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Después llegaron a Jericó. Más tarde, salió Jesús de la ciudad acompañado de sus discípulos y de una gran multitud. Un mendigo ciego llamado Bartimeo (el hijo de Timeo) estaba sentado junto al camino. Al oír que el que venía era Jesús de Nazaret, se puso a gritar: ―¡Jesús, Hijo de David, ten compasión de mí! Muchos lo reprendían para que se callara, pero él se puso a gritar aún más: ―¡Hijo de David, ten compasión de mí! Jesús se detuvo y dijo: ―Llamadlo. Así que llamaron al ciego. ―¡Ánimo! —le dijeron—. ¡Levántate! Te llama. Él, arrojando la capa, dio un salto y se acercó a Jesús. ―¿Qué quieres que haga por ti? —le preguntó. ―Rabí, quiero ver —respondió el ciego.