MIQUEAS 1:1-9
MIQUEAS 1:1-9 Reina Valera 2020 (RV2020)
Palabra que el Señor dirigió a Miqueas de Moreset en los días de Jotam, Acaz y Ezequías, reyes de Judá; lo que vio sobre Samaria y Jerusalén. Oíd, pueblos todos; está atenta, tierra, y cuanto hay en ti. El Señor, el Señor desde su santo templo, sea testigo contra vosotros. Porque el Señor sale de su lugar, desciende y camina sobre las alturas de la tierra. Los montes se derretirán debajo de él y los valles se hendirán como la cera delante del fuego, como las aguas que corren por una pendiente. Todo esto por la rebelión de Jacob, por los pecados de la casa de Israel. ¿Cuál es la rebelión de Jacob? ¿No es acaso Samaria? ¿Cuál es el lugar alto de Judá? ¿No es acaso Jerusalén? Haré, pues, de Samaria montones de ruinas, tierra para plantar viñas. Derramaré sus piedras por el valle y descubriré sus cimientos. Todas sus estatuas serán despedazadas, todos sus dones serán quemados en el fuego, y asolaré todos sus ídolos, porque con salario de prostitutas los juntó, y salario de prostitución volverán a ser. Por esto me lamentaré y gemiré; andaré descalzo y desnudo, aullaré como los chacales, me lamentaré como los avestruces. Porque su herida es dolorosa, y llegó hasta Judá; llegó hasta la puerta de mi pueblo, hasta Jerusalén.
MIQUEAS 1:1-9 La Palabra (versión española) (BLP)
Palabra del Señor que fue dirigida a Miqueas de Moréset en tiempos de Jotán, Ajaz y Ezequías, reyes de Judá, y visiones que tuvo referentes a Samaría y Jerusalén. ¡Escuchad, pueblos todos! Presta atención, tierra, y todo cuanto la llena: El Señor Dios en su santo Templo va a testimoniar contra vosotros. El Señor sale de su morada, desciende sobre los montes de la tierra. A su paso se derriten los montes como cera en presencia del fuego, se resquebrajan los valles como cortados por el agua que se precipita en torrentera. Y es que Jacob se ha rebelado, Israel amontona pecados. ¿Cuál es la rebelión de Jacob? ¿No está acaso en Samaría? ¿Cuáles los altozanos de Judá? ¿No están en la misma Jerusalén? Pues bien, reduciré a Samaría a un montón de ruinas, a un campo donde se planten viñas. Haré rodar sus piedras hasta el valle y dejaré al descubierto sus cimientos. Todos sus ídolos serán destruidos y echadas a las llamas sus ganancias; haré trizas todas sus imágenes que, si fueron paga de prostitución, en paga de prostitución se convertirán. Por eso me lamentaré y haré duelo, caminaré descalzo y desnudo, aullaré como hacen los chacales y gemiré como las avestruces. Porque su herida es incurable, ha llegado hasta Judá, hasta la capital de mi pueblo, hasta alcanzar Jerusalén.
MIQUEAS 1:1-9 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Este es el mensaje que el Señor dirigió a Miqueas de Moréset y lo que por revelación le comunicó acerca de Samaria y Jerusalén en los tiempos en que Jotam, Ahaz y Ezequías reinaban en Judá. Pueblos todos, escuchad esto; habitantes de todo el país, prestad atención: El Señor, desde su santo templo, va a ser testigo contra vosotros. El Señor saldrá del lugar donde habita y vendrá caminando sobre las cumbres de los montes. Debajo de sus pies se fundirán los montes como cera puesta al fuego, y los valles se abrirán en dos como cortados por las aguas de un torrente. Todo esto, por la rebeldía del pueblo de Jacob, por los pecados del reino de Israel. ¿Dónde está la rebeldía de Jacob? ¡En el pueblo de Samaria! ¿Y dónde los santuarios paganos de Judá? ¡En la propia Jerusalén! Por eso dice el Señor: “Haré de la ciudad de Samaria un montón de ruinas, un campo abierto donde plantar viñas. Esparciré por el valle las piedras de la ciudad y pondré al descubierto sus cimientos. Todos sus ídolos quedarán hechos pedazos, y quemados todos sus troncos sagrados. Puesto que fueron hechos con dinero de prostitutas, en dinero de prostitutas los convertiré otra vez.” Por eso lloraré con profunda tristeza; por eso andaré descalzo y desnudo, aullando como un chacal y gritando como un pollo de avestruz. Porque la herida de Samaria es incurable: ha alcanzado a Judá y ha llegado hasta Jerusalén, la ciudad donde vive mi pueblo.
MIQUEAS 1:1-9 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Esta es la palabra que el SEÑOR dirigió a Miqueas de Moréset, durante los reinados de Jotán, Acaz y Ezequías, reyes de Judá. Esta es la visión que tuvo acerca de Samaria y de Jerusalén. SEÑOR Escuchad, pueblos todos; presten atención la tierra y todo lo que hay en ella. Desde su santo templo el Señor, el SEÑOR omnipotente, será testigo contra vosotros. ¡Mirad! Ya sale el SEÑOR de su morada; ya baja y se encamina hacia las cumbres de la tierra. A su paso se derriten las montañas como la cera junto al fuego; se parten en dos los valles como partidos por el agua de un torrente. Y todo esto por la transgresión de Jacob, por los pecados del pueblo de Israel. ¿Acaso no representa Samaria la transgresión de Jacob? ¿Y no es acaso en Jerusalén donde están los santuarios paganos de Judá? Dejaré Samaria hecha un montón de ruinas: ¡convertida en campo arado para viñedos! Arrojaré sus piedras al valle, y pondré al descubierto sus cimientos. Todos sus ídolos serán hechos pedazos; toda su paga de prostituta será arrojada al fuego. Yo destrozaré todas sus imágenes. Todo cuanto ganó como prostituta, en paga de prostituta se convertirá. Por eso lloraré y gritaré de dolor, y andaré descalzo y desnudo. Aullaré como chacal y gemiré como avestruz. Porque la herida de Samaria es incurable: ha llegado hasta Judá. Se ha extendido hasta mi pueblo, ¡hasta la entrada misma de Jerusalén!