LUCAS 20:27-36
LUCAS 20:27-36 Reina Valera 2020 (RV2020)
Se acercaron entonces algunos de los saduceos, que, como niegan la resurrección, le hicieron esta pregunta: —Maestro, Moisés nos dejó escrito que si el hermano de alguno muere dejando mujer, pero no hijos, su hermano debe casarse con ella y dar descendencia a su hermano difunto. Pues bien, el caso es que había siete hermanos y el primero se casó, pero murió sin hijos. El segundo se casó entonces con la viuda, y también murió sin dejar descendencia. Lo mismo ocurrió con el tercero y con los demás. Finalmente también murió ella. Así pues, en la resurrección, ¿de cuál de ellos será mujer, ya que con los siete estuvo casada? Les respondió Jesús: —En este mundo, las personas se casan y se dan en casamiento, pero entre quienes sean dignas de alcanzar la vida futura y la resurrección de los muertos, ni se casarán ni se darán en casamiento. Tampoco morirán porque son como los ángeles, y son hijos de Dios por ser hijos de la resurrección.
LUCAS 20:27-36 La Palabra (versión española) (BLP)
Después de esto se acercaron a Jesús algunos saduceos que, como niegan que vaya a haber resurrección, le hicieron esta pregunta: —Maestro, Moisés nos dejó escrito que si el hermano de uno muere teniendo esposa, pero no hijos, el siguiente hermano deberá casarse con la viuda para dar descendencia al hermano difunto. Pues bien, hubo una vez siete hermanos; el primero de ellos se casó, pero murió sin haber tenido hijos. El segundo y el tercero se casaron también con la viuda, y así hasta los siete; pero los siete murieron sin haber tenido hijos. La última en morir fue la mujer. Así pues, en la resurrección, ¿de cuál de ellos será esposa, si los siete estuvieron casados con ella? Jesús les dijo: —El matrimonio es algo que pertenece a este mundo. Pero los que merezcan resucitar y entrar en el reino venidero, ya no tendrán nada que ver con el matrimonio, como tampoco tendrán nada que ver con la muerte, porque serán como ángeles; serán hijos de Dios, porque habrán resucitado.
LUCAS 20:27-36 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Después acudieron algunos saduceos a ver a Jesús. Los saduceos niegan que haya resurrección de los muertos, y por eso le plantearon este caso: –Maestro, Moisés nos dejó escrito que si un hombre casado muere sin haber tenido hijos con su mujer, el hermano del difunto deberá tomar por esposa a la viuda para darle hijos al hermano que murió. Pues bien, había una vez siete hermanos, el primero de los cuales se casó, pero murió sin dejar hijos. El segundo y luego el tercero se casaron con la viuda, y lo mismo hicieron los demás, pero los siete murieron sin dejar hijos. Finalmente murió también la mujer. Así pues, en la resurrección, ¿cuál de ellos la tendrá por esposa, si los siete estuvieron casados con ella? Jesús les contestó: –En este mundo, los hombres y las mujeres se casan; pero los que merezcan llegar a aquel otro mundo y resucitar, sean hombres o mujeres, ya no se casarán, puesto que ya tampoco podrán morir. Serán como los ángeles, y serán hijos de Dios por haber resucitado.
LUCAS 20:27-36 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Luego, algunos de los saduceos, que decían que no hay resurrección, se acercaron a Jesús y le plantearon un problema: ―Maestro, Moisés nos enseñó en sus escritos que, si un hombre muere y deja a la viuda sin hijos, el hermano de ese hombre tiene que casarse con la viuda para que su hermano tenga descendencia. Pues bien, había siete hermanos. El primero se casó y murió sin dejar hijos. Entonces el segundo y el tercero se casaron con ella, y así sucesivamente murieron los siete sin dejar hijos. Por último, murió también la mujer. Ahora bien, en la resurrección, ¿de cuál será esposa esta mujer, ya que los siete estuvieron casados con ella? ―La gente de este mundo se casa y se da en casamiento —les contestó Jesús—. Pero en cuanto a los que sean dignos de tomar parte en el mundo venidero por la resurrección: esos no se casarán ni serán dados en casamiento, ni tampoco podrán morir, pues serán como los ángeles. Son hijos de Dios porque toman parte en la resurrección.