LUCAS 19:1-6
LUCAS 19:1-6 Reina Valera 2020 (RV2020)
Jesús entró en Jericó e iba recorriendo la ciudad. Ocurrió que un hombre rico llamado Zaqueo, jefe de recaudadores de impuestos, deseaba ver quién era Jesús. Pero como era pequeño de estatura, y la gente le impedía verlo, echó a correr, y adelantándose a todos, trepó a un sicómoro para verle, pues Jesús iba a pasar por allí. Cuando Jesús llegó a aquel lugar, miró hacia arriba, vio a Zaqueo y le dijo: —Zaqueo, date prisa, desciende. Hoy es necesario que me hospede en tu casa. Zaqueo bajó en seguida y lleno de alegría recibió en su casa a Jesús.
LUCAS 19:1-6 La Palabra (versión española) (BLP)
Jesús entró en Jericó e iba recorriendo la ciudad. Vivía allí un hombre rico llamado Zaqueo, que era jefe de recaudadores de impuestos y que deseaba conocer a Jesús. Pero era pequeño de estatura, y la gente le impedía verlo. Así que echó a correr y, adelantándose a todos, fue a encaramarse a un sicómoro para poder verlo cuando pasara por allí. Al llegar Jesús a aquel lugar, miró hacia arriba, vio a Zaqueo y le dijo: —Zaqueo, baja enseguida, porque es preciso que hoy me hospede en tu casa. Zaqueo bajó a toda prisa, y lleno de alegría recibió en su casa a Jesús.
LUCAS 19:1-6 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Jesús entró en Jericó e iba atravesando la ciudad. Vivía en ella un hombre rico llamado Zaqueo, jefe de los que cobraban impuestos para Roma. Quería conocer a Jesús, pero no conseguía verle, porque había mucha gente y Zaqueo era de baja estatura. Así que, echando a correr, se adelantó, y para alcanzar a verle se subió a un árbol junto al cual tenía que pasar Jesús. Al llegar allí, Jesús miró hacia arriba y le dijo: –Zaqueo, baja en seguida porque hoy he de quedarme en tu casa. Zaqueo bajó aprisa, y con alegría recibió a Jesús.
LUCAS 19:1-6 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Jesús llegó a Jericó y comenzó a atravesar la ciudad. Resulta que había allí un hombre llamado Zaqueo, jefe de los recaudadores de impuestos, que era muy rico. Estaba tratando de ver quién era Jesús, pero la multitud se lo impedía, pues era de baja estatura. Por eso se adelantó corriendo y se subió a un árbol sicómoro para poder verlo, ya que Jesús iba a pasar por allí. Llegando al lugar, Jesús miró hacia arriba y le dijo: ―Zaqueo, baja en seguida. Voy a quedarme hoy en tu casa. Así que se apresuró a bajar y, muy contento, recibió a Jesús en su casa.