LUCAS 18:12-14
LUCAS 18:12-14 La Palabra (versión española) (BLP)
Ayuno dos veces por semana y pago al Templo la décima parte de todas mis ganancias». En cambio, el recaudador de impuestos, que se mantenía a distancia, ni siquiera se atrevía a levantar la vista del suelo, sino que se golpeaba el pecho y decía: «¡Oh Dios!, ten compasión de mí, que soy pecador». Os digo que este recaudador de impuestos volvió a casa con sus pecados perdonados; el fariseo, en cambio, no. Porque Dios humillará a quien se ensalce a sí mismo; pero ensalzará a quien se humille a sí mismo.
LUCAS 18:12-14 Reina Valera 2020 (RV2020)
Ayuno dos veces a la semana y doy diezmos de todo lo que poseo». En cambio el recaudador de impuestos, que se mantenía a cierta distancia, ni siquiera se atrevía a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho diciendo: «¡Oh Dios!, ten compasión de mí, que soy pecador». Os digo que el recaudador de impuestos descendió a su casa más justificado que el otro, porque cualquiera que se ensalza será humillado y el que se humilla será ensalzado.
LUCAS 18:12-14 La Palabra (versión española) (BLP)
Ayuno dos veces por semana y pago al Templo la décima parte de todas mis ganancias». En cambio, el recaudador de impuestos, que se mantenía a distancia, ni siquiera se atrevía a levantar la vista del suelo, sino que se golpeaba el pecho y decía: «¡Oh Dios!, ten compasión de mí, que soy pecador». Os digo que este recaudador de impuestos volvió a casa con sus pecados perdonados; el fariseo, en cambio, no. Porque Dios humillará a quien se ensalce a sí mismo; pero ensalzará a quien se humille a sí mismo.
LUCAS 18:12-14 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Ayuno dos veces por semana y te doy la décima parte de todo lo que gano.’ A cierta distancia, el cobrador de impuestos ni siquiera se atrevía a levantar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho y decía: ‘¡Oh Dios, ten compasión de mí que soy pecador!’ Os digo que este cobrador de impuestos volvió a su casa perdonado por Dios; pero no el fariseo. Porque el que a sí mismo se engrandece será humillado, y el que se humilla será engrandecido.”
LUCAS 18:12-14 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Ayuno dos veces a la semana y doy la décima parte de todo lo que recibo”. En cambio, el recaudador de impuestos, que se había quedado a cierta distancia, ni siquiera se atrevía a alzar la vista al cielo, sino que se golpeaba el pecho y decía: “¡Oh Dios, ten compasión de mí, que soy pecador!” »Os digo que este, y no aquel, volvió a su casa justificado ante Dios. Pues todo el que a sí mismo se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido».