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LEVÍTICO 6:3-21

LEVÍTICO 6:3-21 Reina Valera 2020 (RV2020)

o por haber hallado lo perdido y negarlo después, o por jurar en falso en alguna de aquellas cosas en que suele pecar el hombre; entonces, si ha pecado y ofendido, restituirá aquello que robó, o el daño del despojo, o el depósito que se le encomendó, o lo perdido que halló, o todo aquello sobre lo que hubiera jurado falsamente; lo restituirá por entero a aquel a quien pertenece, y añadirá a ello la quinta parte en el día de su expiación. Para la expiación de su culpa llevará al Señor un carnero sin defecto de los rebaños, conforme a tu estimación, y lo dará al sacerdote para la ceremonia. El sacerdote hará expiación por él delante del Señor, y obtendrá el perdón de cualquiera de aquellas cosas en que se suele ofender. El Señor habló a Moisés: —Diles a Aarón y a sus hijos que estas son las instrucciones en cuanto al holocausto: estará sobre el fuego encendido del altar, y arder sobre el altar durante toda la noche y hasta el día siguiente. El sacerdote se pondrá su vestidura de lino y cubrirá su cuerpo con calzoncillos de lino. Cuando el fuego haya consumido el holocausto, recogerá las cenizas de encima del altar y las pondrá al lado. Después se quitará sus vestiduras, se pondrá otras ropas y sacará las cenizas fuera del campamento a un lugar ritualmente puro. El fuego encendido sobre el altar no se apagará, sino que el sacerdote pondrá leña en él cada mañana, acomodará el holocausto encima de él y allí quemará las grasas de los sacrificios de paz. El fuego arderá continuamente en el altar: no se apagará. Esta es la ley de la ofrenda: La ofrecerán los hijos de Aarón delante del Señor ante el altar. Uno de ellos tomará un puñado de la flor de harina de la ofrenda, con su aceite y todo el incienso que está sobre ella, y lo hará arder sobre el altar como un memorial de olor grato al Señor. La parte sobrante de la ofrenda la comerán Aarón y sus hijos en el atrio del tabernáculo de reunión, pues debe comerse sin levadura y en un lugar santo. No se cocerá con levadura: la he dado a ellos como su porción de mis ofrendas quemadas; es cosa santísima, lo mismo que el sacrificio por el pecado y el sacrificio por la culpa. Todos los hombres de entre los hijos de Aarón comerán de ella. Estatuto perpetuo será para vuestras generaciones en lo tocante a las ofrendas quemadas para el Señor. Toda cosa que las toque quedará santificada. El Señor habló a Moisés: —Esta es la ofrenda que Aarón y sus hijos ofrecerán al Señor el día que sean ungidos: la décima parte de un efa de flor de harina, la mitad por la mañana y la otra mitad por la tarde, como ofrenda perpetua. En una sartén se preparará con aceite; frita la presentarás, y ofrecerás los pedazos cocidos como ofrenda de olor grato al Señor.

LEVÍTICO 6:3-21 La Palabra (versión española) (BLP)

El sacerdote se vestirá su túnica y calzones de lino y, cuando el fuego haya consumido el holocausto, apartará las cenizas del altar y las pondrá a un lado del mismo. Después se quitará sus ropas, se pondrá otras ropas y llevará las cenizas a un lugar puro fuera del campamento. El fuego se mantendrá permanentemente encendido sobre el altar sin dejar que se apague; cada mañana el sacerdote lo alimentará con leña, colocará el holocausto encima de él y quemará sobre él la grasa de los sacrificios de comunión. El fuego deberá arder continuamente en el altar; no se dejará apagar. Este es el ritual para la ofrenda de cereal: la presentarán los aaronitas en presencia del Señor delante del altar. Se tomará un puñado de flor de harina de la ofrenda de cereal, junto con el aceite y con todo el incienso que corresponda a la ofrenda, y lo quemará sobre el altar como porción simbólica de olor grato al Señor. El resto de la ofrenda lo comerán Aarón y sus hijos; lo comerán sin levadura en lugar sagrado, dentro del atrio de la Tienda del encuentro. No se usará levadura para cocinar la ofrenda. Yo se lo he asignado como participación en mis ofrendas; es algo muy sagrado en cuanto ofrenda de purificación y ofrenda de reparación. Todos los varones aaronitas comerán de ella. Es esta una norma perpetua para las futuras generaciones en lo que se refiere a las ofrendas para el Señor. Cualquier cosa con la que entren en contacto quedará consagrada. Le dijo también Dios a Moisés: —Esta es la ofrenda que Aarón y sus descendientes presentarán al Señor el día de su unción: dos kilos de flor de harina como ofrenda perpetua, la otra mitad por la mañana y la mitad por la tarde. Se preparará con aceite en una sartén; la presentarás bien frita y partida en trozos como ofrenda de pasteles y de olor grato al Señor. Cualquier sacerdote ungido descendiente de Aarón hará esta ofrenda. Es esta una norma perpetua: la ofrenda será quemada completamente en honor del Señor. Esta ofrenda de cereal del sacerdote será quemada totalmente; en ningún caso se comerá. Dijo el Señor a Moisés: —Di a Aarón y a sus hijos: Este es el ritual para la ofrenda de purificación: la víctima para la ofrenda será degollada en presencia del Señor en el lugar donde se degüella el holocausto, pues se trata de algo muy sagrado. La comerá el sacerdote que la haya ofrecido en expiación por el pecado; será comida en lugar sagrado, en el atrio de la Tienda del encuentro. Todo lo que entre en contacto con la carne de la víctima quedará consagrado; y si algún vestido queda salpicado con la sangre de la víctima, lo lavarás en lugar sagrado. Si la víctima fue cocida en vasija de barro, se hará añicos la vasija; si lo fue en vasija de bronce, será fregada y lavada con agua.

LEVÍTICO 6:3-21 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)

o por negar haber encontrado un objeto perdido, o por hacer un juramento falso –cualquiera de esas cosas en que uno comete pecado–, será culpable de ese pecado. Por lo tanto, tendrá que devolver lo que había robado o conseguido a la fuerza, o aquello que se le había confiado, o el objeto encontrado, o cualquiera otra cosa por la que hubiera jurado falsamente. Tendrá que devolverlo todo a su dueño, más una quinta parte, cuando presente su sacrificio por la culpa. Su sacrificio al Señor será un carnero sin defecto, cuyo valor tú calcularás, y el cual tomará él del rebaño y se lo llevará al sacerdote como sacrificio por la culpa. Entonces el sacerdote obtendrá del Señor el perdón de cualquiera de aquellas cosas en que esa persona hubiera pecado, y el pecado se le perdonará.” El Señor se dirigió a Moisés y le dijo: “Dales a Aarón y a sus hijos las siguientes instrucciones relativas a los holocaustos: El animal sacrificado deberá dejarse sobre las brasas del altar durante toda la noche, para que el fuego lo queme. El sacerdote se cubrirá el cuerpo poniéndose ropa y calzones de lino; luego recogerá las cenizas del animal quemado sobre el altar, y las pondrá a un lado del altar. Después se cambiará de ropa y se llevará las cenizas a un lugar limpio fuera del campamento. “El fuego que arde en el altar no debe apagarse nunca. El sacerdote le añadirá leña todas las mañanas, y dispondrá sobre el fuego el animal que se va a quemar; y quemará también en el altar la grasa de los sacrificios de reconciliación. El fuego del altar estará siempre encendido. No debe apagarse nunca. “Las siguientes instrucciones se refieren a las ofrendas de cereales: Los sacerdotes las ofrecerán ante el altar, delante del Señor. Uno de ellos tomará un puñado de la harina ofrendada y de su aceite, junto con todo el incienso que va con la ofrenda, y los hará arder en el altar como ofrenda quemada de memorial, de aroma agradable al Señor. Y la parte restante de la ofrenda se la comerán Aarón y sus hijos, sin levadura y en un lugar consagrado, en el atrio de la tienda del encuentro. No la cocerán con levadura. Les ha sido dada como la parte que les corresponde de mis ofrendas quemadas, y es una cosa santísima, como lo son los sacrificios por el pecado y por la culpa. Para siempre en el futuro, todos los varones descendientes de Aarón podrán comer la parte que les corresponde de las ofrendas quemadas al Señor. Cualquier cosa que toque estas ofrendas quedará consagrada.” El Señor se dirigió a Moisés y le dijo: “Esta es la ofrenda que Aarón y sus descendientes deben presentar al Señor cuando sean consagrados como sacerdotes: dos kilos de la mejor harina como ofrenda de cereales, presentando la mitad por la mañana y la otra mitad al atardecer, sin faltar un solo día. Prepararán la ofrenda en una sartén, bien mezclada con aceite, y luego la presentarán partida en pedazos como ofrenda de aroma agradable al Señor.

LEVÍTICO 6:3-21 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)

o si encuentra algo que se perdió y niega tenerlo, o si comete perjurio en alguna de las cosas en que se acostumbra a pecar, será culpable y deberá devolver lo que haya robado, o quitado, o lo que se le haya dado a guardar, o el objeto perdido que niega tener, o cualquier otra cosa por la que haya cometido perjurio. Así que deberá restituirlo íntegramente y añadir la quinta parte de su valor. Todo esto lo entregará a su dueño el día que presente su sacrificio por la culpa. Le llevará al SEÑOR un carnero sin defecto, cuyo precio será fijado como sacrificio por la culpa. Lo presentará al sacerdote, quien hará expiación ante el SEÑOR por esa persona, y cualquier cosa por la que se haya hecho culpable le será perdonada». El SEÑOR le dijo a Moisés que les ordenara a Aarón y a sus hijos: «Esta es la ley respecto al holocausto: El holocausto se dejará arder sobre el altar toda la noche hasta el amanecer, y el fuego del altar se mantendrá encendido. El sacerdote, vestido con su túnica de lino y su ropa interior de lino, removerá las cenizas del holocausto consumido por el fuego sobre el altar, y las echará a un lado del altar. Luego se cambiará de ropa y sacará del campamento las cenizas, llevándolas a un lugar ritualmente puro. Mientras tanto, el fuego se mantendrá encendido sobre el altar; no deberá apagarse. Cada mañana el sacerdote pondrá más leña sobre el altar, y encima de este colocará el holocausto para quemar en él la grasa del sacrificio de comunión. El fuego sobre el altar no deberá apagarse nunca; siempre deberá estar encendido. »Esta es la ley respecto a la ofrenda de cereal: Los hijos de Aarón la presentarán ante el SEÑOR, delante del altar. El sacerdote tomará de la ofrenda un puñado de flor de harina con aceite, así como todo el incienso que está sobre la ofrenda de cereal. Todo esto lo quemará en el altar, como ofrenda memorial de aroma grato al SEÑOR. Aarón y sus hijos se comerán el resto de la ofrenda, pero sin levadura y en un lugar santo, que podrá ser el atrio de la Tienda de reunión. No se cocerá con levadura, porque esa es la porción que les doy de mis sacrificios presentados por fuego. Es una porción sumamente sagrada, como lo son el sacrificio expiatorio y el sacrificio por la culpa. Todos los hijos varones de Aarón podrán comer de ella. Es un estatuto perpetuo para vuestros descendientes, respecto a los sacrificios presentados por fuego al SEÑOR. Cualquier cosa que toque los sacrificios quedará consagrada». El SEÑOR le dijo a Moisés: «Esta es la ofrenda que Aarón y sus hijos deben presentar al SEÑOR el día en que sean ungidos: dos kilos de flor de harina, como ofrenda regular de cereal. Una mitad de la ofrenda se presentará por la mañana, y la otra mitad por la tarde. Se preparará con aceite en una sartén, y se llevará amasada y se presentará en porciones, como una ofrenda de cereal de aroma grato al SEÑOR.