LEVÍTICO 26:23-38
LEVÍTICO 26:23-38 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
“Si a pesar de todo esto no os corregís, sino que seguís oponiéndoos a mí, yo también me opondré a vosotros y os castigaré aún siete veces más por vuestros pecados. Haré venir sobre vosotros una espada que vengue el pacto; y correréis a refugiaros en vuestras ciudades, pero yo os enviaré enfermedades y caeréis en poder del enemigo. “Cuando yo destruya vuestra provisión de alimentos, diez mujeres cocerán en un solo horno vuestro pan, y lo racionaréis tanto que, aunque comáis, no quedaréis satisfechos. “Si a pesar de esto no me obedecéis, sino que seguís oponiéndoos a mí, yo también me opondré a vosotros, y con ira os castigaré aún otras siete veces más por vuestros pecados. Entonces os comeréis a vuestros propios hijos e hijas. Yo destruiré vuestros santuarios paganos y partiré en dos vuestros altares de incienso; amontonaré vuestros cuerpos sin vida sobre los cuerpos sin vida de vuestros ídolos, y os mostraré mi desprecio; arruinaré vuestras ciudades y destruiré vuestros santuarios, y no me deleitaré más con el aroma de vuestros perfumes. “Destruiré el país, y aquellos enemigos vuestros que vengan a vivir en él, se quedarán asombrados. A vosotros os esparciré entre las naciones, y con la espada desnuda os perseguiré; vuestro país se convertirá en un desierto y vuestras ciudades en espantosas ruinas. Entonces la tierra disfrutará de tranquilidad todo el tiempo que permanezca desolada y que vosotros estéis en el país de vuestros enemigos; así descansará y se desquitará de lo que antes no descansó. Todo el tiempo que permanezca desolada, la tierra disfrutará de los días de reposo que no tuvo mientras vosotros habitasteis en ella. “A aquellos de vosotros que queden con vida en terreno enemigo, les haré sentir tanto miedo que huirán por el simple ruido de una hoja al caer; huirán como si los persiguieran con una espada, y caerán sin que nadie los persiga. Tropezarán unos contra otros como si huyeran de la guerra, aunque nadie los persiga. ¡Ninguno de vosotros podrá hacer frente a vuestros enemigos! Seréis destruidos entre las naciones, y el país de vuestros enemigos acabará con vosotros.
LEVÍTICO 26:23-38 Reina Valera 2020 (RV2020)
Si con estas cosas no os corregís, sino que perseveráis en vuestra obstinación contra mí, yo también procederé en contra de vosotros, y os heriré aún siete veces por vuestros pecados. Traeré sobre vosotros espada vengadora, en vindicación del pacto, y si buscáis refugio en vuestras ciudades, yo enviaré pestilencia entre vosotros y seréis entregados en manos del enemigo. Cuando yo os quebrante el sustento del pan, cocerán diez mujeres todo vuestro pan en un horno, y os lo devolverán tan bien medido que comeréis y no os saciaréis. Si aun con esto no me escucháis, sino que continuáis en abierta desobediencia a mí, yo procederé en contra de vosotros con ira, y os castigaré aún siete veces por vuestros pecados. Comeréis la carne de vuestros hijos y la de vuestras hijas. Destruiré vuestros lugares altos, derribaré vuestras imágenes, pondré vuestros cuerpos muertos sobre los de vuestros ídolos, y mi alma os abominará. Dejaré desiertas vuestras ciudades, asolaré vuestros santuarios y no oleré la fragancia de vuestro suave perfume. Asolaré también la tierra, y se pasmarán por ello vuestros enemigos que en ella habiten. A vosotros os esparciré entre las naciones, y desenvainaré la espada contra vosotros. Vuestra tierra quedará asolada y desiertas vuestras ciudades. Entonces la tierra gozará sus días de reposo durante todos los días que esté asolada, mientras vosotros estéis en la tierra de vuestros enemigos; la tierra descansará entonces y gozará sus días de reposo. Durante todo el tiempo que esté asolada, descansará por lo que no reposó en los días estipulados cuando habitabais en ella. A los que queden de vosotros, les infundiré tal cobardía en sus corazones, en la tierra de sus enemigos, que el sonido de una hoja que se mueva los hará huir como se huye ante la espada, y caerán sin que nadie los persiga. Tropezarán los unos con los otros como si huyeran ante la espada, aunque nadie los persiga, y no podréis resistir en presencia de vuestros enemigos. Pereceréis entre las naciones, y la tierra de vuestros enemigos os consumirá.
LEVÍTICO 26:23-38 La Palabra (versión española) (BLP)
Y si tampoco estas cosas consiguen que os enmendéis, sino que seguís enfrentados conmigo, yo también me enfrentaré con vosotros y os azotaré todavía siete veces por vuestras transgresiones. Traeré contra vosotros la espada vengadora; ella se encargará de vengar la alianza. Y si os refugiáis en vuestras ciudades, yo enviaré la peste contra vosotros y caeréis en manos del enemigo. Cuando yo os corte el sustento de pan, cocerán diez mujeres vuestro pan en un solo horno y os lo darán racionado; comeréis, pero nunca os saciaréis. Y si aun con todo esto no me obedecéis, sino que seguís enfrentándoos conmigo, yo me enfrentaré contra vosotros con ira y os castigaré también siete veces más por vuestras transgresiones: tendréis incluso que comer la carne de vuestros hijos y la carne de vuestras hijas. Destruiré vuestros santuarios de los altos y demoleré vuestros altares de incienso; apilaré vuestros cadáveres sobre los cadáveres de vuestros ídolos y os detestaré. Devastaré vuestras ciudades, asolaré vuestros santuarios y no oleré la fragancia de vuestro suave perfume. Arrasaré la tierra de suerte que vuestros enemigos residentes en ella se horrorizarán al verla; a vosotros os dispersaré entre las naciones, desenvainaré la espada detrás de vosotros, vuestra tierra quedará arrasada y vuestras ciudades desiertas. Entonces la tierra podrá resarcirse de sus años sabáticos, mientras dure la desolación y vosotros estéis en la tierra de vuestros enemigos. La tierra podrá descansar entonces y resarcirse de sus años sabáticos. Mientras dure la desolación, la tierra descansará los días de descanso que no le disteis cuando vivíais en ella. Y a los que de vosotros sobrevivan, los llenaré de tal cobardía que, estando en la tierra de vuestros enemigos, el simple sonido de una hoja que se mueva los pondrá en fuga, huirán como ante la espada y caerán sin que nadie los persiga. Y aunque nadie los persiga, tropezarán los unos con los otros como se tropieza a la vista de la espada. No podréis resistir delante de vuestros enemigos. Pereceréis en medio de las naciones y la tierra de vuestros enemigos os devorará.
LEVÍTICO 26:23-38 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
»Si a pesar de todo esto no aceptáis mi disciplina, sino que continuáis oponiéndoos a mí, yo también seguiré oponiéndome a vosotros. Yo mismo os heriré siete veces por vuestros pecados. Dejaré caer sobre vosotros la espada de la venganza prescrita en el pacto. Cuando os retiréis a vuestras ciudades, os enviaré una plaga, y caeréis en poder del enemigo. Cuando yo destruya vuestros trigales, diez mujeres hornearán para vosotros pan en un solo horno. Y lo distribuiréis racionado, de tal manera que comeréis, pero no os saciaréis. »Si a pesar de esto todavía no me obedecéis, sino que continuáis oponiéndoos a mí, entonces yo también me pondré definitivamente en contra vuestra. Siete veces os castigaré por vuestros pecados, y tendréis que comeros la carne de vuestros hijos y de vuestras hijas. Destruiré vuestros santuarios paganos, demoleré vuestros altares de incienso y amontonaré vuestros cadáveres sobre las figuras sin vida de vuestros ídolos. Volcaré mi odio sobre vosotros; convertiré en ruinas vuestras ciudades y asolaré vuestros santuarios. No me complaceré más en el aroma de vuestras ofrendas, que me era grato. De tal manera asolaré al país, que vuestros enemigos que vengan a ocuparlo quedarán atónitos. Os dispersaré entre las naciones: desenvainaré la espada, y os perseguiré hasta dejar desolada vuestra tierra, y en ruinas vuestras ciudades. Entonces la tierra disfrutará de sus años sabáticos todo el tiempo que permanezca desolada, mientras vosotros viváis en el país de vuestros enemigos. Así la tierra descansará y disfrutará de sus sábados. Mientras la tierra esté desolada, tendrá el descanso que no tuvo durante los años sabáticos en que vosotros la habitasteis. »En cuanto a los que sobrevivan, tan profundo será el temor que les infundiré en tierra de sus enemigos que hasta el susurro de una hoja movida por el viento los pondrá en fuga. Correrán como quien huye de la espada, y caerán sin que nadie los persiga. Como si huyeran de la espada, tropezarán unos con otros sin que nadie los persiga, y no podréis hacer frente a vuestros enemigos. Pereceréis en medio de las naciones; el país de vuestros enemigos os devorará.