LAMENTACIONES 3:25-31
LAMENTACIONES 3:25-31 La Palabra (versión española) (BLP)
Es bueno el Señor con quien confía en él y lo busca. Es bueno esperar callado la salvación del Señor. Es bueno que el ser humano cargue el yugo desde niño, que aguante solo y callado pues el Señor se lo ha impuesto; que su boca bese el polvo por si aún queda esperanza; y que ofrezca su mejilla al que lo hiere y lo afrenta. Porque no ha de rechazarnos eternamente mi Dios
LAMENTACIONES 3:25-31 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
El Señor es bueno con los que en él confían, con los que a él recurren. Es mejor esperar en silencio que el Señor nos ayude. Es mejor que el hombre se someta desde su juventud. El hombre debe quedarse solo y callado cuando el Señor se lo impone; debe, humillado, besar el suelo, pues tal vez aún haya esperanza; debe ofrecer la mejilla a quien le hiera, y recibir el máximo de ofensas. El Señor no ha de abandonarnos para siempre.
LAMENTACIONES 3:25-31 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Bueno es el SEÑOR con quienes en él confían, con todos los que lo buscan. Bueno es esperar calladamente que el SEÑOR venga a salvarnos. Bueno es que el hombre aprenda a llevar el yugo desde su juventud. ¡Dejadle estar solo y en silencio, porque así el SEÑOR se lo impuso! ¡Que hunda el rostro en el polvo! ¡Tal vez haya esperanza todavía! ¡Que dé la otra mejilla a quien lo hiera, y quede así cubierto de oprobio! El Señor nos ha rechazado, pero no será para siempre.