JOB 28:12-18
JOB 28:12-18 Reina Valera 2020 (RV2020)
Mas, ¿dónde se halla la sabiduría? ¿Dónde se encuentra el lugar de la inteligencia? Nadie sabe su valor, pues no se encuentra en este mundo. El abismo dice: «No está en mí», y dice el mar: «Tampoco está conmigo». No se dará a cambio de oro ni su precio será a peso de plata. No puede ser pagada con oro de Ofir, con ónice precioso ni con zafiro. No se le pueden comparar el oro ni el diamante, ni se la cambiará por alhajas de oro fino. ¿Y qué decir del coral o de las perlas? ¡La sabiduría vale más que las piedras preciosas!
JOB 28:12-18 La Palabra (versión española) (BLP)
¿Pero de dónde se saca la Sabiduría o dónde está el yacimiento de la Inteligencia? El ser humano ignora su camino, no se halla en el mundo de los vivos. Dice el Abismo: «No está en mí»; responde el Mar: «No está conmigo». No puede comprarse con oro ni pagarse a peso de plata; no se adquiere con oro de Ofir, con ónices preciosos o zafiros; no la igualan el oro ni el vidrio, ni se paga con vasos de oro fino; nada valen el cristal y los corales, la Sabiduría es más cara que las perlas
JOB 28:12-18 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
¿Pero de dónde viene la sabiduría? ¿En qué lugar está la inteligencia? Su valor no lo conoce el hombre, ni la encuentra en este mundo. El océano dice: “Aquí no está”, y el mar: “Yo no la tengo.” No se puede conseguir con oro ni se puede comprar con plata. No se puede pagar con el oro más precioso ni con joyas de cornalina o de zafiro. Vale más que el oro y el cristal; no se puede cambiar por objetos de oro puro. La sabiduría es más preciosa que el coral, más que el cristal de roca y que las perlas.
JOB 28:12-18 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Pero ¿dónde se halla la sabiduría? ¿Dónde habita la inteligencia? Nadie sabe lo que ella vale, pues no se encuentra en este mundo. «Aquí no está», dice el océano; «Aquí tampoco», responde el mar. No se compra con el oro más fino, ni su precio se calcula en plata. No se compra con oro refinado, ni con ónice ni zafiros. Ni el oro ni el cristal se comparan con ella, ni se cambia por áureas joyas. ¡Para qué mencionar el coral y el jaspe! ¡La sabiduría vale más que los rubíes!