JEREMÍAS 29:11-14
JEREMÍAS 29:11-14 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Yo sé los planes que tengo para vosotros, planes para vuestro bienestar y no para vuestro mal, a fin de daros un futuro lleno de esperanza. Yo, el Señor, lo afirmo. Entonces me invocaréis; vendréis a mí en oración, y yo os escucharé. Me buscaréis y me encontraréis, porque me buscaréis de todo corazón. Sí, yo dejaré que me encontréis y haré que cambie vuestra suerte: os sacaré de todas las naciones y de todos los lugares por donde os dispersé, os reuniré y haré que volváis a este lugar de donde os desterré. Yo, el Señor, lo afirmo.’
JEREMÍAS 29:11-14 Reina Valera 2020 (RV2020)
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice el Señor, pensamientos de paz y no de mal, para daros el fin que esperáis. Entonces me invocaréis. Vendréis y oraréis a mí, y yo os escucharé. Me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Seré hallado por vosotros, dice el Señor; haré volver a vuestros cautivos y os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os arrojé, dice el Señor. Y os haré volver al lugar de donde os hice llevar.
JEREMÍAS 29:11-14 La Palabra (versión española) (BLP)
Yo conozco mis designios sobre vosotros —oráculo del Señor—. Son designios de bienestar, no de desgracia, pues os ofrezco un futuro y una esperanza. Me invocaréis y vendréis a suplicarme, y yo os escucharé; me buscaréis y me encontraréis, si es que venís a buscarme de todo corazón. Me dejaré encontrar por vosotros —oráculo del Señor—, acabaré con vuestro destierro y os reuniré de todas las naciones y lugares por donde os dispersé, y os haré regresar al lugar de donde os hice deportar —oráculo del Señor—.
JEREMÍAS 29:11-14 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Porque yo sé muy bien los planes que tengo para vosotros —afirma el SEÑOR—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de daros un futuro y una esperanza. Entonces me invocaréis, y vendréis a suplicarme, y yo os escucharé. Me buscaréis y me encontraréis cuando me busquéis de todo corazón. Me dejaré encontrar —afirma el SEÑOR—, y os haré volver del cautiverio. Yo os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os haya dispersado, y os haré volver al lugar del cual os deporté», afirma el SEÑOR.