HEBREOS 4:1-7
HEBREOS 4:1-7 Reina Valera 2020 (RV2020)
Por eso, mientras la promesa de entrar en el reposo de Dios aún permanece, debemos tener cuidado, no sea que alguno de vosotros se quede sin entrar. También a nosotros se nos ha anunciado la buena nueva como a ellos; pero a ellos de nada les sirvió haber oído la palabra, porque no se adhirieron por la fe a aquellos que sí la oyeron. Pero los que hemos creído entramos en el reposo, conforme a lo que Dios dijo: Por tanto, juré en mi ira que no entrarían en mi reposo , aunque sus obras estaban acabadas desde la fundación del mundo. Pues en cierto lugar de las Escrituras se dice del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día . Y nuevamente dice en el mismo texto: No entrarán en mi reposo . Por lo tanto, puesto que falta que algunos entren en el reposo, y aquellos a quienes primero se les anunció la buena nueva no entraron por causa de la desobediencia, Dios otra vez determina un día: el «Hoy», por medio de David quien dijo mucho tiempo después, y según el pasaje citado anteriormente
HEBREOS 4:1-7 La Palabra (versión española) (BLP)
La promesa de entrar en el descanso ofrecido por Dios sigue en pie. Pero es preciso estar muy alerta, no sea que alguno de vosotros pierda la ocasión de entrar. Porque el evangelio nos ha sido anunciado tanto a nosotros como a ellos; solo que a ellos de nada les sirvió haberlo oído al no estar unidos mediante la fe a quienes lo escucharon. Nosotros, en cambio, los que hemos creído, podemos entrar en ese descanso del que Dios ha dicho: No entrarán en mi descanso tal como lo juré lleno de enojo. Bien entendido que sus obras concluyeron cuando dio fin a la creación del mundo, pues así ha quedado dicho del día séptimo en cierto lugar de la Escritura: Y el día séptimo descansó Dios de todos sus trabajos. Pero volvamos a nuestro pasaje: No entrarán en mi descanso. Eso quiere decir que algunos sí han de entrar en él. Y como los primeros en recibir el evangelio no consiguieron entrar debido a su actitud rebelde, Dios vuelve a señalar un día: el «hoy» del que habla David mucho tiempo después en el pasaje citado más arriba
HEBREOS 4:1-7 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Por eso, mientras todavía contamos con la promesa de entrar en ese reposo de Dios, debemos tener cuidado, no sea que alguno de vosotros no lo logre. Porque también a nosotros se nos anunció la buena noticia, lo mismo que a ellos; pero a ellos no les sirvió de nada el oirla, porque no se unieron por la fe a los que habían obedecido al mensaje. Pero nosotros, que hemos creído, entraremos en ese reposo del que Dios ha dicho: “Por eso juré en mi furor que no entrarían en mi reposo.” Sin embargo, Dios terminó su trabajo después de crear el mundo, pues en alguna parte de las Escrituras se dice del séptimo día: “Dios reposó de todo su trabajo el séptimo día.” Y otra vez se dice en las Escrituras: “No entrarán en mi reposo.” Pero todavía falta que algunos entren en ese reposo, ya que, por haber desobedecido, no entraron los que primero oyeron el anuncio. Por eso, Dios ha vuelto a señalar un día, un nuevo “hoy”, y lo ha hecho hablándonos mediante lo que mucho tiempo después dijo David en la Escritura mencionada: “Si hoy escucháis lo que Dios dice, no endurezcáis vuestro corazón.”
HEBREOS 4:1-7 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Cuidémonos, por tanto, no sea que, aunque la promesa de entrar en su reposo sigue vigente, alguno de vosotros parezca quedarse atrás. Porque a nosotros, lo mismo que a ellos, se nos ha anunciado la buena noticia; pero el mensaje que escucharon no les sirvió de nada, porque no se unieron en la fe a los que habían prestado atención a ese mensaje. En tal reposo entramos los que somos creyentes, conforme Dios ha dicho: «Así que, en mi enojo, hice este juramento: “Jamás entrarán en mi reposo”». Es cierto que su trabajo quedó terminado con la creación del mundo, pues en algún lugar se ha dicho así del séptimo día: «Y en el séptimo día reposó Dios de todas sus obras». Y en el pasaje citado también dice: «Jamás entrarán en mi reposo». Sin embargo, todavía falta que algunos entren en ese reposo, y los primeros a quienes se les anunció la buena noticia no entraron por causa de su desobediencia. Por eso, Dios volvió a fijar un día, que es «hoy», cuando mucho después declaró por medio de David lo que ya se ha mencionado: «Si oís hoy su voz, no endurezcáis el corazón».