GÁLATAS 5:22-26
GÁLATAS 5:22-26 Reina Valera 2020 (RV2020)
Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza. Contra estas cosas no hay ley. Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos. Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu. No busquemos la vanagloria, ni nos irritemos unos a otros ni sintamos envidia entre nosotros.
GÁLATAS 5:22-26 La Palabra (versión española) (BLP)
En cambio, el Espíritu produce amor, alegría, paz, tolerancia, amabilidad, bondad, lealtad, humildad y dominio de sí mismo. Ninguna ley existe en contra de todas estas cosas. Y no en vano los que pertenecen a Cristo Jesús han crucificado lo que en ellos hay de apetitos desordenados, junto con sus pasiones y malos deseos. Si, pues, vivimos animados por el Espíritu, actuemos conforme al Espíritu. No busquemos vanaglorias, enzarzándonos en rivalidades y envidiándonos unos a otros.
GÁLATAS 5:22-26 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
En cambio, el Espíritu da frutos de amor, alegría y paz; de paciencia, amabilidad y bondad; de fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene cosas como estas. Y los que son de Cristo Jesús han crucificado ya la naturaleza del hombre pecador junto con sus pasiones y malos deseos. Si ahora vivimos por el Espíritu, dejemos también que el Espíritu nos guíe. No seamos orgullosos ni sembremos rivalidades y envidias entre nosotros.
GÁLATAS 5:22-26 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
En cambio, el fruto del Espíritu es amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene estas cosas. Los que son de Cristo Jesús han crucificado la naturaleza pecaminosa, con sus pasiones y deseos. Si el Espíritu nos da vida, andemos guiados por el Espíritu. No dejemos que la vanidad nos lleve a irritarnos y a envidiarnos unos a otros.