ÉXODO 40:1-16
ÉXODO 40:1-16 Reina Valera 2020 (RV2020)
Luego el Señor dijo a Moisés: —El primer día del mes primero harás levantar el tabernáculo de reunión; pondrás en él el arca del testimonio y la cubrirás con el velo. Meterás la mesa y la pondrás en orden; meterás también el candelabro y encenderás sus lámparas. Pondrás el altar de oro para el incienso delante del arca del testimonio y colgarás la cortina a la entrada, delante del tabernáculo. Después pondrás el altar del holocausto ante la entrada del tabernáculo de reunión. Luego pondrás la fuente entre el tabernáculo de reunión y el altar, y la llenarás de agua. Finalmente, alrededor levantarás el atrio y colgarás la cortina a la entrada del atrio. Después tomarás el aceite de la unción, ungirás el tabernáculo y todo lo que está en él; lo santificarás con todos sus utensilios, y será santo. Ungirás también el altar del holocausto y todos sus utensilios; santificarás el altar, y será un altar santísimo. Asimismo ungirás la fuente y su base, y la santificarás. Luego llevarás a Aarón y a sus hijos a la puerta del tabernáculo de reunión, y los lavarás con agua. Harás vestir a Aarón las vestiduras sagradas, lo ungirás y lo consagrarás, para que sea mi sacerdote. Después harás que se acerquen sus hijos, y los vestirás con túnicas; los ungirás como ungiste a su padre, y serán mis sacerdotes. Su unción les conferirá el sacerdocio por derecho perpetuo, a lo largo de las generaciones. Moisés hizo conforme a todo lo que el Señor le había mandado. Así lo hizo.
ÉXODO 40:1-16 La Palabra (versión española) (BLP)
El Señor dijo a Moisés: —El día primero del primer mes, montarás la Morada, la Tienda del encuentro. En su interior colocarás el Arca del testimonio y la ocultarás con el velo. Traerás la mesa y colocarás sobre ella sus accesorios; llevarás también el candelabro y le colocarás las lámparas. Delante del Arca del testimonio pondrás el altar de oro para el incienso y colgarás la cortina a la entrada de la Morada. Después colocarás el altar de los holocaustos a la entrada de la Morada, la Tienda del encuentro; y entre el altar y la Tienda del encuentro situarás la pila y la llenarás de agua. Asimismo instalarás el atrio alrededor de la Morada y a su entrada colgarás la cortina. Tomarás el aceite de la unción y ungirás la Morada y todo lo que hay en ella. Así la consagrarás con todos sus utensilios, y será un lugar sagrado. Ungirás igualmente el altar de los holocaustos y todos sus utensilios. Así lo consagrarás, y será algo sacrosanto. También ungirás y consagrarás la pila y su base. Después conducirás a Aarón y sus hijos a la entrada de la Tienda del encuentro, donde los lavarás con agua. Seguidamente, le pondrás a Aarón las vestiduras sagradas, lo ungirás y lo consagrarás como mi sacerdote. Después harás que se acerquen sus hijos; les pondrás las túnicas; y los ungirás de igual modo que ungiste a su padre, para que sean mis sacerdotes. Esta unción les conferirá el sacerdocio por derecho perpetuo, a lo largo de las generaciones. Moisés hizo todo conforme a lo ordenado por el Señor.
ÉXODO 40:1-16 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
El Señor se dirigió a Moisés y le dijo: “El día primero del mes primero debes instalar el santuario, la tienda del encuentro con Dios. Pon dentro de ella el arca del pacto, y cúbrela con el velo. Pon también dentro la mesa y el candelabro. Arregla bien la mesa y colócale al candelabro sus lámparas. Pon el altar de oro para el incienso delante del arca del pacto, y cuelga la cortina de la entrada del santuario. Pon luego el altar de los holocaustos a la entrada del santuario, la tienda del encuentro. Pon después la palangana entre la tienda del encuentro y el altar, y llénala de agua. Instala entonces el atrio alrededor y cuelga la cortina de la entrada del atrio. “Toma después el aceite de consagrar y derrámalo sobre el santuario y sobre todo lo que está en él. Así lo consagrarás con todos sus utensilios, y será un lugar santo. Derrama también aceite de consagrar sobre el altar de los holocaustos y sobre todos sus utensilios. Así lo consagrarás, y será un altar santísimo. Derrama aceite sobre la palangana y su base, y así la consagrarás. “Lleva después a Aarón y a sus hijos cerca de la puerta de la tienda del encuentro, y haz que se bañen y que Aarón se ponga la ropa especial. Luego derrama aceite sobre él para consagrarlo como mi sacerdote. Acerca luego a sus hijos, ponles las túnicas y derrama aceite sobre ellos, como lo hiciste con Aarón, para que sean mis sacerdotes. Con este derramamiento de aceite sobre ellos, se establece un sacerdocio eterno, a lo largo de los siglos.” Moisés lo hizo todo tal como el Señor se lo había ordenado.
ÉXODO 40:1-16 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
El SEÑOR habló con Moisés y le dijo: «En el día primero del mes primero, levanta el santuario, es decir, la Tienda de reunión. Pon en su interior el arca del pacto, y cúbrela con la cortina. Lleva adentro la mesa y ponla en orden. Pon también dentro del santuario el candelabro, y enciende sus lámparas. Coloca el altar del incienso frente al arca del pacto, y cuelga la cortina a la entrada del santuario. »Coloca el altar de los holocaustos frente a la entrada del santuario, la Tienda de reunión; coloca el lavamanos entre la Tienda de reunión y el altar, y pon agua en él. Levanta el atrio en su derredor, y coloca la cortina a la entrada del atrio. »Toma el aceite de la unción, y unge el santuario y todo lo que haya en él; conságralo, junto con todos sus utensilios, para que sea un objeto sagrado. Unge también el altar de los holocaustos y todos sus utensilios; conságralo, para que sea un objeto muy sagrado. Unge además, y consagra, el lavamanos y su pedestal. »Lleva luego a Aarón y a sus hijos a la entrada de la Tienda de reunión, haz que se bañen, y ponle a Aarón sus vestiduras sagradas. Úngelo y conságralo, para que ministre como sacerdote mío. Acerca entonces a sus hijos, ponles sus túnicas, y úngelos como ungiste a su padre, para que ministren como mis sacerdotes. La unción les conferirá un sacerdocio válido para todas las generaciones venideras». Moisés hizo todo tal y como el SEÑOR se lo mandó.