ÉXODO 20:15-26
ÉXODO 20:15-26 Reina Valera 2020 (RV2020)
No hurtarás. No dirás falso testimonio contra tu prójimo. No codiciarás la casa de tu prójimo: no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su esclavo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo. Todo el pueblo observaba el estruendo, los relámpagos, el sonido de la bocina y el monte que humeaba. Al ver esto, el pueblo tuvo miedo y se mantuvo alejado. Entonces dijeron a Moisés: —Habla tú con nosotros, y nosotros oiremos; pero que no hable Dios con nosotros, no sea que muramos. Moisés respondió al pueblo: —No temáis, pues Dios ha venido para poneros a prueba, para que su temor esté ante vosotros y no pequéis. Y mientras el pueblo se mantenía alejado, Moisés se acercó a la oscuridad en la cual estaba Dios. El Señor dijo a Moisés: —Así dirás a los hijos de Israel: Vosotros habéis visto que os he hablado desde el cielo. No os hagáis dioses de plata ni dioses de oro para ponerlos junto a mí. Me harás un altar de tierra, y sacrificarás sobre él tus holocaustos y tus ofrendas de paz, tus ovejas y tus vacas. En todo lugar donde yo haga que se recuerde mi nombre, vendré a ti y te bendeciré. Y si me haces un altar de piedras, no las labres de cantería, porque si alzas tus herramientas sobre él, lo profanarás. Tampoco subirás por gradas a mi altar, para que tu desnudez no se descubra junto a él.
ÉXODO 20:15-26 La Palabra (versión española) (BLP)
No robarás. No darás testimonio falso en perjuicio de tu prójimo. No codiciarás la casa de tu prójimo, ni su mujer, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su asno, ni nada de lo suyo. El pueblo entero fue testigo de los truenos y relámpagos, del estruendo como de trompeta y del monte envuelto en humo; los israelitas estaban aterrorizados y se mantenían a distancia. Entonces dijeron a Moisés: —Háblanos tú y te escucharemos; pero que no nos hable Dios, porque moriremos. Moisés les respondió: —No temáis. Dios ha venido para poneros a prueba, para que le tengáis respeto y no pequéis. Y mientras Moisés se aproximaba a la nube oscura en la que estaba Dios, el pueblo se mantuvo a distancia. El Señor dijo a Moisés: —Di a los israelitas: Habéis visto que os he hablado desde el cielo. No os fabriquéis, pues, dioses de oro o plata, ni los pongáis junto a mí. Hazme un altar de tierra en el que me ofrecerás tus ovejas y vacas, como holocaustos y sacrificios de comunión. Vendré y te bendeciré en cualquier lugar donde yo quiera que se recuerde mi nombre. Y si me construyes un altar de piedras, estas no deben estar labradas, porque si las tocas con tus herramientas, las profanarás. Tampoco subirás a mi altar por escalones, para que no se te vean tus partes cuando estés arriba.
ÉXODO 20:15-26 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
“No robes. “No digas mentiras en perjuicio de tu prójimo. “No codicies la casa de tu prójimo: no codicies su mujer, ni su esclavo o su esclava, ni su buey, ni su asno, ni nada que le pertenezca.” Todos los israelitas fueron testigos de los truenos y relámpagos, del sonido de trompetas y del monte envuelto en humo; pero tenían miedo y se mantenían alejados. Así que dijeron a Moisés: –Háblanos tú, y obedeceremos; pero que no nos hable Dios, no sea que muramos. Moisés les contestó: –No tengáis miedo. Dios ha venido para poneros a prueba y para que siempre sintáis temor de él, a fin de que no pequéis. Y mientras el pueblo se mantenía alejado, Moisés se acercó a la nube oscura en la que estaba Dios. El Señor dijo a Moisés: “Diles esto a los israelitas: ‘Ya habéis visto que he hablado desde el cielo con vosotros. No hagáis ídolos de oro o plata para adorarlos como a mí. Hacedme un altar de tierra, y ofrecedme en él los animales de vuestros rebaños y ganados como holocaustos y sacrificios de reconciliación. Yo vendré y os bendeciré en cada lugar en el que quiera que se recuerde mi nombre. Y si me hacéis un altar de piedras, que no sean piedras labradas, porque al labrar la piedra con herramientas se la hace indigna de un altar. Y mi altar no debe tener escalones, para que vosotros, al subir, no mostréis ninguna parte desnuda de vuestro cuerpo.’
ÉXODO 20:15-26 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
»No robes. »No des falso testimonio en contra de tu prójimo. »No codicies la casa de tu prójimo: No codicies su esposa, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su asno, ni nada que le pertenezca». Ante ese espectáculo de truenos y relámpagos, de sonidos de trompeta y de la montaña envuelta en humo, los israelitas temblaban de miedo y se mantenían a distancia. Así que le suplicaron a Moisés: ―Háblanos tú, y te escucharemos. Si Dios nos habla, seguramente moriremos. ―No tengáis miedo —les respondió Moisés—. Dios ha venido a poneros a prueba, para que sintáis temor de él y no pequéis. Entonces Moisés se acercó a la densa oscuridad en la que estaba Dios, pero los israelitas se mantuvieron a distancia. El SEÑOR le ordenó a Moisés: «Diles lo siguiente a los israelitas: “Vosotros mismos habéis oído que os he hablado desde el cielo. No me ofendáis; no os hagáis dioses de plata o de oro, ni los adoréis. Hacedme un altar de tierra, y ofrecedme sobre él vuestros holocaustos y sacrificios de comunión, vuestras ovejas y vuestros toros. Yo vendré al lugar donde os pida invocar mi nombre, y os bendeciré. Si me hacéis un altar de piedra, no lo construyáis con piedras labradas, pues las herramientas profanan la piedra. Y no le pongáis escalones a mi altar, no sea que al subir se os vean los genitales”.