ESTER 7:1-6
ESTER 7:1-6 Reina Valera 2020 (RV2020)
Fue, pues, el rey con Amán al banquete de la reina Ester. Y en el segundo día, mientras bebían vino, dijo el rey a Ester: —Reina Ester, ¿cuál es la petición que quieres que te sea concedida? ¿Cuál es tu deseo? Aunque sea la mitad del reino, te será otorgado. Entonces, la reina Ester respondió: —Oh rey, si me he ganado su favor, y si esto le parece bien, pido que se me conceda la vida de mi pueblo y mi propia vida. Pues yo y mi pueblo hemos sido vendidos, para ser exterminados, para ser muertos y aniquilados. Si hubiéramos sido vendidos como esclavos, me callaría; pero nuestra muerte sería para el rey un daño irreparable. El rey Asuero preguntó a la reina Ester: —¿Quién es, y dónde está, el que ha ensoberbecido su corazón para hacer semejante cosa? Ester dijo: —¡El enemigo y adversario es este malvado Amán! Se turbó Amán entonces delante del rey y de la reina.
ESTER 7:1-6 La Palabra (versión española) (BLP)
El rey Asuero y Amán asistieron al banquete de la reina Ester, y también en este segundo día, durante el brindis, dijo el rey a Ester: —¡Dime lo que deseas, y lo tendrás; aunque sea la mitad de mi reino! La reina Ester respondió: —Si me he ganado el favor del rey, y si esto le parece bien, mi petición y mi deseo es que el rey me conceda mi vida y la de mi pueblo. Pues mi pueblo y yo hemos sido vendidos para ser exterminados, asesinados, aniquilados. Si hubiéramos sido vendidos como esclavos y esclavas, me habría callado, pues este no sería un motivo tan serio como para molestar al rey. El rey Asuero le preguntó a la reina Ester: —¿Quién es y dónde está el que ha concebido tal cosa? —¡El enemigo y adversario es ese miserable de Amán! —respondió Ester. Amán, entonces, quedó aterrado ante el rey y la reina.
ESTER 7:1-6 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
El rey y Amán fueron al banquete, y también en este segundo día dijo el rey a Ester durante el banquete: –Pídeme lo que quieras, y te lo concederé. ¡Aun si me pides la mitad de mi reino! Ester le respondió: –Si Su Majestad me tiene cariño, y si le parece bien, lo único que deseo y pido es que Su Majestad nos perdone la vida a mí y a mi pueblo; pues tanto a mi pueblo como a mí se nos ha vendido para ser destruidos por completo. Si hubiéramos sido vendidos como esclavos, yo no diría nada, porque el enemigo no causaría entonces tanto daño a los intereses de Su Majestad. Asuero preguntó: –¿Quién es y dónde está el que ha pensado hacer semejante cosa? –¡El enemigo y adversario es ese malvado Amán! –respondió Ester. Al oir esto, Amán se quedó paralizado de miedo ante el rey y la reina.
ESTER 7:1-6 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
El rey y Amán fueron al banquete de la reina Ester, y al segundo día, mientras brindaban, el rey le preguntó otra vez: ―Dime qué deseas, reina Ester, y te lo concederé. ¿Cuál es tu petición? ¡Aun cuando fuera la mitad del reino, te la concedería! Ester respondió: ―Si me he ganado el favor del rey, y si le parece bien, mi deseo es que me conceda la vida. Mi petición es que se compadezca de mi pueblo. Porque a mí y a mi pueblo se nos ha vendido para exterminio, muerte y aniquilación. Si solo se nos hubiera vendido como esclavos, yo me habría quedado callada, pues tal angustia no sería motivo suficiente para inquietar al rey. El rey le preguntó: ―¿Y quién es ese que se ha atrevido a concebir semejante barbaridad? ¿Dónde está? ―¡El adversario y enemigo es este miserable Amán! —respondió Ester. Amán quedó aterrorizado ante el rey y la reina.