COLOSENSES 2:16-19
COLOSENSES 2:16-19 Reina Valera 2020 (RV2020)
Por tanto, que nadie os juzgue en asuntos de comida o de bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o sábados. Todo esto no es más que una sombra de lo que ha de venir; pero la realidad es Cristo. Que nadie os prive de vuestro premio alardeando de humildad y de rendir culto a los ángeles, entrando en detalles de cosas que no han visto; están llenos de orgullo debido a su mentalidad carnal; pero no están unidos a la Cabeza, por medio de la cual todo el cuerpo, a través de las coyunturas y ligamentos, se nutre y crece con el crecimiento que da Dios.
COLOSENSES 2:16-19 La Palabra (versión española) (BLP)
Que nadie, pues, os critique por cuestiones de comida o de bebida, ni por lo que respecta a celebraciones, novilunios o sábados. Todo esto no es más que sombra de lo que ha de venir. La realidad es Cristo. Que no os escamoteen el premio esos que hacen alarde de humildad y de dar culto a los ángeles, esos que presumen de visiones y que con sus pensamientos mundanos están inflados de vano orgullo. Es gente que ha perdido el contacto con Cristo, es decir, con la cabeza por medio de la cual todo el cuerpo, a través de los ligamentos y junturas, se mantiene unido y recibe el alimento querido por Dios.
COLOSENSES 2:16-19 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Por tanto, que nadie os critique por lo que coméis o bebéis, o por cuestiones tales como los días de fiesta, las lunas nuevas y los sábados. Todo esto no es sino la sombra de lo que ha de venir, pero la realidad misma es Cristo. No dejéis que os condenen esos que se hacen pasar por muy humildes y que dan culto a los ángeles, que pretenden tener visiones y que se hinchan de orgullo a causa de sus pensamientos mundanos. Ellos no están unidos a la cabeza, la cual hace crecer todo el cuerpo al alimentarlo y unir cada una de sus partes conforme al plan de Dios.
COLOSENSES 2:16-19 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Así que nadie os juzgue a vosotros por lo que coméis o bebéis, o con respecto a días de fiesta religiosa, de luna nueva o de reposo. Todo esto es una sombra de las cosas que van a venir; la realidad se halla en Cristo. No dejéis que os prive de esta realidad ninguno de esos que se ufanan en fingir humildad y adoración de ángeles. Los tales hacen alarde de lo que no han visto; y, envanecidos por su razonamiento humano, no se mantienen firmemente unidos a la Cabeza. Por la acción de esta, todo el cuerpo, sostenido y ajustado mediante las articulaciones y ligamentos, va creciendo como Dios quiere.