HECHOS 3:18-21
HECHOS 3:18-21 Reina Valera 2020 (RV2020)
Pero Dios ha cumplido así lo que había anunciado por medio de todos sus profetas: que su Cristo habría de padecer. Así que arrepentíos y convertíos para que sean borrados vuestros pecados, para que vengan tiempos de consuelo procedentes del Señor y os envíe a Cristo Jesús, que ya os fue anunciado. Ciertamente, es necesario que el cielo reciba a Jesús hasta el momento en que todas las cosas sean restauradas, lo cual Dios ya ha anunciado desde los tiempos antiguos por medio de sus santos profetas.
HECHOS 3:18-21 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Pero de este modo Dios cumplió lo que de antemano había anunciado por medio de todos los profetas: que su Mesías tenía que padecer. Por tanto, para que sean borrados vuestros pecados, arrepentíos y volveos a Dios, a fin de que vengan tiempos de descanso de parte del Señor, enviándoos el Mesías que ya había sido preparado para vosotros, el cual es Jesús. Es necesario que él permanezca en el cielo hasta que llegue el tiempo de la restauración de todas las cosas, como Dios lo ha anunciado desde hace siglos por medio de sus santos profetas.
HECHOS 3:18-21 La Palabra (versión española) (BLP)
Pero Dios cumplía de este modo lo que había anunciado por medio de los profetas en lo que se refiere a los sufrimientos que su Mesías había de padecer. Por tanto, convertíos y volved a Dios, para que vuestros pecados os sean borrados. Así hará venir el Señor una era de tranquilidad, y enviará de nuevo al Mesías que previamente os había destinado, es decir, a Jesús. Pero ahora es preciso que Jesús permanezca en el cielo hasta que llegue el momento en que todo sea restaurado, según declaró Dios en época precedente por medio de sus santos profetas.
HECHOS 3:18-21 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Pero Dios cumplió de este modo lo que antes había anunciado por medio de todos sus profetas: que su Mesías tenía que morir. Por eso, volveos a Dios y convertíos, para que él borre vuestros pecados. Quizás entonces el Señor os mande tiempos de alivio, enviándoos a Jesús, a quien desde el principio había escogido como Mesías para vosotros. Aunque por ahora Jesucristo debe permanecer en el cielo, hasta que Dios ponga todas las cosas en orden, como dijo por medio de sus santos profetas que vivieron en los tiempos antiguos.