HECHOS 28:25-28
HECHOS 28:25-28 Reina Valera 2020 (RV2020)
Y como ya estaban a punto de despedirse y aún no habían llegado a un acuerdo, les dijo: —Bien ha hablado el Espíritu Santo por medio del profeta Isaías cuando dijo a nuestros padres: Ve a este pueblo y diles: De oído oiréis y no entenderéis; y miraréis y no veréis. El corazón de este pueblo se ha vuelto insensible. Con los oídos oyeron pesadamente y han cerrado sus ojos para no ver con los ojos para no oír con los oídos para no entender con el corazón y se conviertan, y yo los sane. Sabed, pues, que a los gentiles se les envía esta salvación de Dios, y ellos sí oirán.
HECHOS 28:25-28 La Palabra (versión española) (BLP)
Se disponían ya a salir, sin haberse puesto de acuerdo entre ellos mismos, cuando Pablo les dirigió estas palabras: —Con razón dijo el Espíritu Santo a vuestros antepasados por medio del profeta Isaías: Ve a decir a este pueblo: «Escucharéis, pero no entenderéis; miraréis, pero no veréis». Porque el corazón de este pueblo está embotado. Son duros de oído y tienen cerrados los ojos para no ver, ni oír, ni entender, ni convertirse a mí para que yo los cure . Sabed, pues —añadió Pablo—, que el mensaje salvador de Dios ha sido ofrecido a los no judíos; ellos sí que le prestarán atención. [
HECHOS 28:25-28 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Y como no se ponían de acuerdo entre sí, comenzaron a marcharse. Pablo les dijo: –Bien les habló el Espíritu Santo a vuestros antepasados por medio del profeta Isaías, diciendo: ‘Anda y dile a este pueblo: Por más que escuchéis, no entenderéis; por más que miréis, no veréis. Pues la mente de este pueblo está entorpecida, tienen tapados los oídos y sus ojos están cerrados, para que no puedan ver ni oir, ni puedan entender; para que no se vuelvan a mí y yo no los sane.’ Sabed, pues, que de ahora en adelante esta salvación de Dios se ofrece a los no judíos, y ellos sí escucharán.
HECHOS 28:25-28 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
No pudieron ponerse de acuerdo entre sí, y comenzaron a irse cuando Pablo añadió esta última declaración: «Con razón el Espíritu Santo habló a vuestros antepasados por medio del profeta Isaías diciendo: »“Ve a este pueblo y dile: ‘Por mucho que oigan, no entenderán; por mucho que vean, no percibirán’. Porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible; se les han embotado los oídos, y se les han cerrado los ojos. De lo contrario, verían con los ojos, oirían con los oídos, entenderían con el corazón y se convertirían, y yo los sanaría”. »Por tanto, quiero que sepáis que esta salvación de Dios se ha enviado a los gentiles, y ellos sí escucharán».