HECHOS 23:1-4
HECHOS 23:1-4 Reina Valera 2020 (RV2020)
Entonces Pablo con la mirada fija en los miembros del Concilio, dijo: —Hermanos, yo con toda buena conciencia he vivido delante de Dios hasta el día de hoy. El sumo sacerdote Ananías ordenó a quienes estaban junto a él que le golpearan en la boca. Entonces Pablo le dijo: —¡Dios te golpeará a ti, hipócrita! Estás sentado ahí para juzgarme conforme a la ley, ¿y violas la ley mandando que me golpeen? Los que estaban presentes preguntaron: —¿Cómo te atreves a insultar al sumo sacerdote de Dios?
HECHOS 23:1-4 La Palabra (versión española) (BLP)
Con la mirada fija en los miembros del Consejo, dijo Pablo: —Hermanos: hasta el presente me he comportado siempre ante Dios con conciencia enteramente limpia. A esto, Ananías, el sumo sacerdote, ordenó a los asistentes que golpearan a Pablo en la boca. Pero este le dijo: —¡Dios es quien te golpeará a ti, grandísimo hipócrita! Estás sentado ahí para juzgarme conforme a la ley, ¿y conculcas la ley mandando que me golpeen? —¿Te atreves a insultar al sumo sacerdote de Dios? —preguntaron los asistentes.
HECHOS 23:1-4 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Pablo miró a los de la Junta Suprema y les dijo: –Hermanos, yo he vivido hasta hoy con la conciencia tranquila delante de Dios. Entonces el sumo sacerdote Ananías mandó a los que estaban cerca de Pablo que le pegaran en la boca. Pablo le dijo: –¡Dios te pegará a ti, hipócrita! Si estás ahí sentado para juzgarme de acuerdo con la ley, ¿por qué, en contra de la ley, mandas que me peguen? Los presentes le dijeron: –¿Así insultas al sumo sacerdote de Dios?
HECHOS 23:1-4 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Pablo se quedó mirando fijamente al Consejo y dijo: ―Hermanos, hasta hoy yo he actuado delante de Dios con toda buena conciencia. Ante esto, el sumo sacerdote Ananías ordenó a los que estaban cerca de Pablo que lo golpearan en la boca. ―¡Hipócrita, a ti también te va a golpear Dios! —reaccionó Pablo—. ¡Ahí estás sentado para juzgarme según la ley!, ¿y tú mismo violas la ley al mandar que me golpeen? Los que estaban junto a Pablo le interpelaron: ―¿Cómo te atreves a insultar al sumo sacerdote de Dios?