HECHOS 13:42-52
HECHOS 13:42-52 Reina Valera 2020 (RV2020)
Cuando ellos salieron de la sinagoga, los gentiles, les rogaron que el siguiente sábado volvieran para seguir hablándoles de estas cosas. Y una vez acabada la reunión, muchos de los judíos y de los prosélitos piadosos siguieron a Pablo y a Bernabé, y ellos siguieron hablándoles y animándolos a perseverar en la gracia de Dios. El siguiente sábado se juntó casi toda la ciudad para oír la palabra de Dios. Los judíos, viendo tanta gente, se llenaron de celos y, difamándole, rebatían lo que Pablo había dicho. Pablo y Bernabé, hablando con valentía, dijeron: —Verdaderamente era necesario que a vosotros primero se os anunciase la palabra de Dios, pero puesto que la desecháis y no os consideráis dignos de recibir la vida eterna, ahora vamos a predicarles a los que no son judíos, porque así nos lo ha mandado el Señor: Te he puesto para luz de las naciones, para que seas mi salvación hasta lo último de la tierra. Los que no eran judíos, oyendo esto, se alegraron y glorificaban la palabra del Señor, y todos los que estaban destinados a recibir la vida eterna creyeron. La palabra del Señor se difundía por toda aquella provincia. Mas los judíos instigaron a mujeres piadosas y distinguidas, así como a los principales de la ciudad, promovieron una persecución contra Pablo y Bernabé y los expulsaron de su territorio. Estos se sacudieron el polvo de los pies en señal de protesta y se fueron a Iconio. Los discípulos estaban gozosos y llenos del Espíritu Santo.
HECHOS 13:42-52 La Palabra (versión española) (BLP)
Cuando Pablo y Bernabé salían de la sinagoga, fueron invitados a volver el sábado siguiente para seguir hablando de estos mismos temas. Se disolvió así la reunión; pero muchos judíos y prosélitos practicantes continuaron en compañía de Pablo y Bernabé, que trataban de convencerlos con sus exhortaciones a que permaneciesen fieles al don recibido de Dios. El sábado siguiente se congregó casi toda la ciudad para escuchar el mensaje del Señor. Pero al ver los judíos tal multitud, se llenaron de envidia y trataban de contrarrestar con insultos los razonamientos de Pablo. En vista de ello, Pablo y Bernabé les dijeron sin miramientos: —Era nuestro deber anunciaros primero a vosotros el mensaje de Dios. Pero ya que lo rechazáis y vosotros mismos os descalificáis para la vida eterna, nos dedicaremos de lleno a los no judíos. Así nos lo ha indicado el Señor: Te he puesto como luz de las naciones y como portador de salvación para el mundo entero . Cuando los no judíos oyeron esto, se alegraron sobremanera y no cesaban de alabar el mensaje del Señor. Y todos los que estaban destinados a la vida eterna abrazaron la fe. El mensaje del Señor se extendió por toda aquella región. Pero los judíos excitaron los ánimos de las damas piadosas y distinguidas, así como de los altos personajes de la ciudad, y organizaron una persecución contra Pablo y Bernabé hasta conseguir arrojarlos de su territorio. Estos, a su vez, sacudieron contra ellos el polvo de sus pies en señal de protesta y emprendieron la marcha hacia Iconio, en tanto que los discípulos quedaban muy gozosos y llenos del Espíritu Santo.
HECHOS 13:42-52 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Cuando Pablo y sus compañeros salieron de la sinagoga de los judíos, los que no eran judíos de nacimiento les pidieron que el siguiente sábado les hablasen también de estas cosas. Una vez terminada la reunión en la sinagoga, muchos de los judíos y de los que se habían convertido al judaísmo siguieron a Pablo y Bernabé. Y estos les aconsejaban que permanecieran firmes en el llamamiento que habían recibido por el amor de Dios. El sábado de la siguiente semana, la ciudad se reunió casi en pleno para oir el mensaje del Señor. Pero al ver tanta gente, los judíos se llenaron de envidia y comenzaron a contradecir a Pablo y a insultarle. Pablo y Bernabé respondieron con valentía: –Teníamos el deber de anunciar el mensaje de Dios en primer lugar a vosotros, que sois judíos; pero, puesto que lo rechazáis y no os consideráis dignos de la vida eterna, nos iremos a los no judíos. Porque así nos lo mandó el Señor, diciendo: ‘Te he puesto como luz de las naciones, para que lleves mi salvación hasta los lugares más lejanos de la tierra.’ Al oir esto, los que no eran judíos se alegraron y comenzaron a decir que el mensaje del Señor era bueno; y creyeron todos los que estaban destinados a la vida eterna. De esta manera se predicaba el mensaje del Señor por toda aquella región. Pero los judíos hablaron con algunas mujeres piadosas y distinguidas, y con los hombres importantes de la ciudad, y los incitaron a levantar una persecución contra Pablo y Bernabé, para echarlos de la región. Entonces estos sacudieron el polvo de sus pies en señal de protesta contra aquella gente, y se fueron a Iconio mientras los creyentes se quedaron llenos de alegría y del Espíritu Santo.
HECHOS 13:42-52 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Al salir ellos de la sinagoga, los invitaron a que el siguiente sábado les hablaran más de estas cosas. Cuando se disolvió la asamblea, muchos judíos y prosélitos fieles acompañaron a Pablo y a Bernabé, los cuales en su conversación con ellos les instaron a perseverar en la gracia de Dios. El siguiente sábado casi toda la ciudad se congregó para oír la palabra del Señor. Pero, cuando los judíos vieron a las multitudes, se llenaron de celos y contradecían con maldiciones lo que Pablo decía. Pablo y Bernabé les contestaron valientemente: «Era necesario que os anunciáramos la palabra de Dios primero a vosotros. Como la rechazáis y no os consideráis dignos de la vida eterna, ahora vamos a dirigirnos a los gentiles. Así nos lo ha mandado el Señor: »“Te he puesto por luz para las naciones, a fin de que lleves mi salvación hasta los confines de la tierra”». Al oír esto, los gentiles se alegraron y celebraron la palabra del Señor; y creyeron todos los que estaban destinados a la vida eterna. La palabra del Señor se difundía por toda la región. Pero los judíos incitaron a mujeres muy distinguidas y favorables al judaísmo, y a los hombres más prominentes de la ciudad, y provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé. Por tanto, los expulsaron de la región. Ellos, por su parte, se sacudieron el polvo de los pies en señal de protesta contra la ciudad, y se fueron a Iconio. Y los discípulos quedaron llenos de alegría y del Espíritu Santo.