2 PEDRO 3:15-16
2 PEDRO 3:15-16 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Tened presente que la paciencia de nuestro Señor significa salvación, tal como os escribió también nuestro querido hermano Pablo, con la sabiduría que Dios le dio. En todas sus cartas se refiere a estos mismos temas. Hay en ellas algunos puntos difíciles de entender, que los ignorantes e inconstantes tergiversan, como lo hacen también con las demás Escrituras, para su propia perdición.
2 PEDRO 3:15-16 Reina Valera 2020 (RV2020)
Y tened en cuenta que la paciencia de nuestro Señor es para salvación. Así os ha escrito también nuestro amado hermano Pablo, según la sabiduría que le ha sido dada. En casi todas sus epístolas habla de estos temas, aunque hay algunas cosas difíciles de entender, que los ignorantes e inconstantes tuercen, como hacen también con las otras Escrituras, para su propia perdición.
2 PEDRO 3:15-16 La Palabra (versión española) (BLP)
Considerad que la paciencia de nuestro Señor es para nosotros salvación. En este sentido os ha escrito también nuestro querido hermano Pablo, con la sabiduría que Dios le ha concedido. Lo repite en todas las cartas en que trata estos temas y en las que hay algunas cosas difíciles de entender, que los ignorantes y poco formados en la fe interpretan torcidamente —como hacen con otros pasajes de las Escrituras—, buscándose con ello su propia ruina.
2 PEDRO 3:15-16 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Tened en cuenta que la paciencia con que nuestro Señor nos trata es para nuestra salvación. Acerca de lo cual también os ha escrito nuestro querido hermano Pablo, según la sabiduría que Dios le ha dado. En cada una de sus cartas os ha hablado de esto, aunque hay en ellas puntos difíciles de entender que los ignorantes y los débiles en la fe tuercen, como tuercen las demás Escrituras, para su propia perdición.
2 PEDRO 3:15-16 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Tened presente que la paciencia de nuestro Señor significa salvación, tal como os escribió también nuestro querido hermano Pablo, con la sabiduría que Dios le dio. En todas sus cartas se refiere a estos mismos temas. Hay en ellas algunos puntos difíciles de entender, que los ignorantes e inconstantes tergiversan, como lo hacen también con las demás Escrituras, para su propia perdición.