1 TIMOTEO 5:19-25
1 TIMOTEO 5:19-25 Reina Valera 2020 (RV2020)
No admitas acusación contra un anciano, a menos que haya dos o tres testigos. A los que pequen, repréndelos delante de todos, para que los demás tengan miedo. Te encarezco delante de Dios, del Señor Jesucristo y de sus ángeles escogidos, que guardes estas cosas sin prejuicios de nadie y que no hagas nada con parcialidad. No impongas fácilmente las manos a nadie ni participes en pecados ajenos. Consérvate puro. De aquí en adelante no bebas agua sola, sino también toma un poco de vino para tu estómago y tus frecuentes enfermedades. Los pecados de algunos hombres se hacen evidentes antes de que lleguen a juicio, a otros se les descubren después. De igual modo se hacen evidentes las buenas obras; y las que no lo son, no se pueden esconder.
1 TIMOTEO 5:19-25 La Palabra (versión española) (BLP)
No aceptes acusación contra un presbítero a no ser que venga avalada por dos o tres testigos. Reprende públicamente a los que pequen. Así escarmentarán los demás. Ante Dios, ante Cristo Jesús y ante los ángeles elegidos te ruego encarecidamente que cumplas todo esto con imparcialidad, sin dejarte arrastrar por preferencias humanas. No impongas a nadie las manos demasiado a la ligera, no sea que te hagas responsable de culpas ajenas. Y tú mismo conserva limpia la conciencia. En adelante, no bebas agua sola; mézclala con un poco de vino para hacer mejor la digestión; ya sabes que con frecuencia sufres indisposiciones. Los pecados de algunos son del dominio público aun antes de ser aireados en juicio; los de otros, en cambio, solo después del juicio salen a la luz. Así sucede con las acciones: las buenas son de dominio público; las que no lo son, tampoco podrán permanecer ocultas.
1 TIMOTEO 5:19-25 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
No hagas caso de acusaciones contra un anciano, si no están apoyadas por dos o tres testigos. A los que siguen pecando debes reprenderlos delante de todos, para que los demás tengan temor. Te encargo delante de Dios, de Cristo Jesús y de los ángeles escogidos, que sigas estas normas sin hacer distinciones ni preferencias. No impongas las manos a nadie sin haberlo pensado bien, para no hacerte cómplice de los pecados de otros. Evita todo lo malo. Puesto que a menudo estás enfermo del estómago y tienes frecuentes dolencias, no bebas agua sola, sino también un poco de vino. Los pecados de algunos se descubren claramente antes de haber ido a juicio; en cambio, los de otros solo aparecen después. Del mismo modo, las obras buenas se descubren claramente; y las que no se ven, tampoco quedarán siempre escondidas.
1 TIMOTEO 5:19-25 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
No admitas ninguna acusación contra un anciano, a no ser que esté respaldada por dos o tres testigos. A los que pecan, repréndelos en público para que sirva de escarmiento. Te insto delante de Dios, de Cristo Jesús y de los santos ángeles a que sigas estas instrucciones sin dejarte llevar de prejuicios ni favoritismos. No te apresures a imponerle las manos a nadie, no sea que te hagas cómplice de pecados ajenos. Consérvate puro. No sigas bebiendo solo agua; toma también un poco de vino a causa de tu mal de estómago y tus frecuentes enfermedades. Los pecados de algunos son evidentes aun antes de ser investigados, mientras que los pecados de otros se descubren después. De igual manera son evidentes las buenas obras y, aunque estén ocultas, tarde o temprano se manifestarán.