1 TIMOTEO 5:17-21
1 TIMOTEO 5:17-21 Reina Valera 2020 (RV2020)
Los ancianos que gobiernan bien, deben ser considerados dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar, pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla y: Digno es el obrero de su salario . No admitas acusación contra un anciano, a menos que haya dos o tres testigos. A los que pequen, repréndelos delante de todos, para que los demás tengan miedo. Te encarezco delante de Dios, del Señor Jesucristo y de sus ángeles escogidos, que guardes estas cosas sin prejuicios de nadie y que no hagas nada con parcialidad.
1 TIMOTEO 5:17-21 La Palabra (versión española) (BLP)
Los presbíteros que desempeñan con acierto el cargo de dirigentes, merecen una especial consideración; sobre todo los que se afanan en la proclamación de la palabra y en la enseñanza. Ya lo dice la Escritura: No pongas bozal al buey que trilla; y también: «El que trabaja tiene derecho a su salario». No aceptes acusación contra un presbítero a no ser que venga avalada por dos o tres testigos. Reprende públicamente a los que pequen. Así escarmentarán los demás. Ante Dios, ante Cristo Jesús y ante los ángeles elegidos te ruego encarecidamente que cumplas todo esto con imparcialidad, sin dejarte arrastrar por preferencias humanas.
1 TIMOTEO 5:17-21 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Los ancianos que gobiernan bien la iglesia deben ser doblemente apreciados, especialmente los que se dedican a predicar y enseñar. Pues la Escritura dice: “No pongas bozal al buey que trilla.” Y también: “El trabajador tiene derecho a su salario.” No hagas caso de acusaciones contra un anciano, si no están apoyadas por dos o tres testigos. A los que siguen pecando debes reprenderlos delante de todos, para que los demás tengan temor. Te encargo delante de Dios, de Cristo Jesús y de los ángeles escogidos, que sigas estas normas sin hacer distinciones ni preferencias.
1 TIMOTEO 5:17-21 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Los ancianos que dirigen bien los asuntos de la iglesia son dignos de doble honor, especialmente los que dedican sus esfuerzos a la predicación y a la enseñanza. Pues la Escritura dice: «No le pongas bozal al buey mientras esté trillando», y «El trabajador merece que se le pague su salario». No admitas ninguna acusación contra un anciano, a no ser que esté respaldada por dos o tres testigos. A los que pecan, repréndelos en público para que sirva de escarmiento. Te insto delante de Dios, de Cristo Jesús y de los santos ángeles a que sigas estas instrucciones sin dejarte llevar de prejuicios ni favoritismos.