1 SAMUEL 17:16-24
1 SAMUEL 17:16-24 La Palabra (versión española) (BLP)
Durante cuarenta días el filisteo se acercó desafiante mañana y tarde. Jesé dijo a su hijo David: —Toma esta medida de grano tostado y estos diez panes para tus hermanos y llévalos rápido al campamento. Lleva también estos diez quesos al capitán de su unidad. Interésate por la salud de tus hermanos y vuelve con alguna señal. Están con Saúl y los israelitas en el valle de Elá, luchando contra los filisteos. Al día siguiente David madrugó, dejó el rebaño al cuidado de un pastor, cargó las provisiones y se marchó, como le había mandado su padre. Cuando llegó al campo de batalla, el ejército salía a tomar posiciones, lanzando el grito de guerra. Israelitas y filisteos tomaron posiciones frente a frente. David dejó la carga que llevaba al cuidado del encargado de intendencia, corrió hacia la formación y se interesó por la salud de sus hermanos. Mientras hablaba con ellos, aquel campeón filisteo llamado Goliat, de Gat, salió de las filas filisteas y volvió a repetir las consabidas palabras. Y David lo oyó. Cuando vieron a aquel hombre, todos los israelitas huyeron de su presencia llenos de miedo.
1 SAMUEL 17:16-24 Reina Valera 2020 (RV2020)
Salía, pues, aquel filisteo por la mañana y por la tarde, y así lo hizo durante cuarenta días. Y dijo Isaí a David, su hijo: —Toma ahora para tus hermanos un efa de este grano tostado y estos diez panes; llévalo pronto al campamento a tus hermanos. Estos diez quesos de leche los llevarás al jefe de los mil; fíjate si tus hermanos están bien y trae algo de ellos como prenda. Mientras tanto, Saúl, los hermanos de David, y todos los de Israel, estaban en el valle de Ela, en armas contra los filisteos. Se levantó, pues, David de mañana, dejó las ovejas al cuidado de un guarda, y se fue con su carga como Isaí le había mandado. Llegó al campamento cuando el ejército salía en orden de batalla y daba el grito de combate. Se pusieron en orden de batalla Israel y los filisteos, ejército frente a ejército. Entonces David dejó su carga en manos del que guardaba las provisiones, y corrió al ejército; cuando llegó preguntó a sus hermanos cómo estaban. Mientras hablaba con ellos, aquel paladín que se ponía en medio de los dos campamentos, llamado Goliat, el filisteo de Gat, salió de entre las filas de los filisteos y dijo las mismas palabras, de modo que lo oyó David. Todos los hombres de Israel que veían a aquel hombre huían de su presencia y sentían gran temor.
1 SAMUEL 17:16-24 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Mientras tanto, aquel filisteo salía a provocar a los israelitas por la mañana y por la tarde, y así lo estuvo haciendo durante cuarenta días. Un día, Jesé dijo a su hijo David: –Toma unos veinte litros de este trigo tostado, y estos diez panes, y llévalos pronto al campamento, a tus hermanos. Llévate también estos diez quesos para el comandante del batallón. Mira cómo están tus hermanos y tráeme algo que pruebe que se encuentran bien. Mientras tanto, Saúl y los hermanos de David y todos los israelitas estaban en el valle de Elá luchando contra los filisteos. Al día siguiente, David madrugó y, dejando las ovejas al cuidado de otro, se puso en camino llevando consigo las provisiones que le entregó Jesé. Cuando llegó al campamento, el ejército se disponía a salir a la batalla y lanzaba gritos de guerra. Los israelitas y los filisteos se alinearon frente a frente. David dejó lo que llevaba al cuidado del encargado de armas y provisiones, y corriendo a las filas se metió en ellas para preguntar a sus hermanos cómo estaban. Mientras hablaba con ellos, aquel guerrero filisteo llamado Goliat, de la ciudad de Gat, salió de entre las filas de los filisteos y volvió a desafiar a los israelitas como lo había estado haciendo hasta entonces. David lo oyó. En cuanto los israelitas vieron a aquel hombre, se llenaron de terror y huyeron de su presencia
1 SAMUEL 17:16-24 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
El filisteo salía mañana y tarde a desafiar a los israelitas, y así lo estuvo haciendo durante cuarenta días. Un día, Isaí le dijo a su hijo David: «Toma esta bolsa de trigo tostado y estos diez panes, y vete pronto al campamento para dárselos a tus hermanos. Lleva también estos diez quesos para el jefe del batallón. Averigua cómo les va a tus hermanos, y tráeme una prueba de que ellos están bien. Los encontrarás en el valle de Elá, con Saúl y todos los soldados israelitas, peleando contra los filisteos». David cumplió con las instrucciones de Isaí. Se levantó muy de mañana y, después de encargarle el rebaño a un pastor, tomó las provisiones y se puso en camino. Llegó al campamento en el momento en que los soldados, lanzando gritos de guerra, salían a tomar sus posiciones. Los israelitas y los filisteos se alinearon frente a frente. David, por su parte, dejó su carga al cuidado del encargado de las provisiones, y corrió a las filas para saludar a sus hermanos. Mientras conversaban, Goliat, el gran guerrero filisteo de Gat, salió de entre las filas para repetir su desafío, y David lo oyó. Cada vez que los israelitas veían a Goliat huían despavoridos.